Se ha convertido en algo constante que, a finales de cada mes, largas filas se evidencian en las estaciones de servicio para poder adquirir el combustible subsidiado, esto debido a diversas causales que hacen que este se agote. Desde el gremio petrolero de Nariño se indicó que si los alcaldes y alcaldesas del departamento refuerzan los controles y si el Gobierno Nacional pone en funcionamiento dos plantas de abastecimiento existentes en la región esto no sucedería.
El gerente general de Petróleos de Nariño, Petronar, Mario Guevara manifestó “en Nariño no se habla de desabastecimiento sino de carencia de cupo, entendiendo que tenemos 10’700.000 galones de cupo mensual y en realidad estamos consumiendo aproximadamente 13’000.000, entonces hay una diferencia significativa en el cupo real que se necesita en nuestro departamento”.
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No hay incremento
En este sentido Guevara indicó “la carencia de cupo se debe primero porque la situación fiscal del país no permite un incremento, segundo porque Nariño se valía de parte del combustible desde Ecuador y una vez se equipararon los precios del ecuatoriano y el colombiano 700 mil galones van para la exprovincia de Obando”.
“Por otra parte, el combustible que se queda en el Valle del Cauca, o Cauca y los bloqueos en las vías y como no tenemos almacenamientos estratégicos en el departamento eso hace que las estaciones acaben su cupo muy temprano y los vehículos se vean obligados a hacer fila”.
Por su parte el presidente nacional de la corporación Petrogas Colombia,Bolívar Madroñero, aseveró “este tema se volvió recurrente, los alcaldes del departamento y de todas las zonas de frontera, 13 total, descuidaron de manera muy directa el control a esa obligación legal a los combustibles líquidos, ellos son los únicos responsables. La Ley 681 del 2001 les dio la facultad d el control exclusivamente a los mandatarios locales. Además de esto la carencia a finales de mes se presenta por el precio, en Nariño debe ser el mismo que tiene Pasto, pero este varía en los demás municipios, además de los desvíos y su uso para actividades ilegales”.
Peticiones
Nariño tiene 684 estaciones de servicio, 660 activas, 50 en la capital. Para lograr evitar el agotamiento de combustible se solicitó “primero el tema de los controles para evitar el desvío de combustibles a actividades ilícitas o a otras zonas del país. Por otra parte, cuando se construye una estación de servicio se debe hacer una evaluación socioeconómica, para ver si la demanda es real evitando que sea para el narcotráfico y la minería, y que se revisen las que ya están construidas”, indicó Guevara.
En este sentido, Madroñero comentó “se debe poner a funcionar a dos empresas que están radicadas en Nariño, una en Tumaco, Petrodecol y una en Chachagüí, Petrodenar, plantas de abastecimiento. Ahí llegaría el combustible para el departamento evitando desviaciones. La otra es la construcción de un poliducto a un municipio que distribuya a los demás, y la última que los alcaldes asuman su responsabilidad tanto en el control de precios y en la llegada del combustible a cada uno de los municipios”.