En las últimas horas la Defensoría del Pueblo dio a conocer la lista de las siete zonas de Colombia, identificadas por el Sistema de Alertas Tempranas de esta dependencia, como las más vulnerables ante los desplazamientos, confinamientos y reclutamiento de menores.
No nos extrañó que nuestro departamento de Nariño, con su costa Pacífica aparezca en cabeza de esa poca honrosa lista, seguido de Bolívar, Antioquia, La Guajira, Cauca, Putumayo y Amazonas, puesto que bien sabemos la gravísima situación por la que atraviesan zonas como la subregión del Telembí.
Allí en estos momentos se registra en el municipio de Roberto Payán, el desplazamiento de cerca de 5 mil personas, entre ellas muchos niños, provenientes de los sectores rurales así como de Magüí y Barbacoas.
Nos referimos a un enorme desplazamiento de las dimensiones del que se registra en Ituango, en el departamento de Antioquia, el que explica las razones de esa alerta temprana, la cual debe mover a las autoridades locales para empezar a diseñar las estrategias a seguir para enfrentar esa peligrosa situación.
En ese sentido, nos preocupa saber que a pesar que el Gobierno Nacional, luego de conocer el enorme desplazamiento que se presenta en Roberto Payán, ordenó el incremento en esa región de unidades de la Fuerza Pública, la triste realidad es que esto no ha sido suficiente, puesto que los enfrentamientos entre los grupos alzados en arma no se detienen y por lo tanto, continúan los desplazamientos.
No nos extrañó que nuestro departamento de Nariño, con su costa pacífica aparezca en cabeza de esa poca honrosa lista, seguido de Bolívar, Antioquia, La Guajira, Cauca, Putumayo y Amazonas, puesto que bien s abemos la gravísima situación por la que atraviesan zonas como la subregión del Telembí.
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Esto nos lleva a pensar en que el Gobierno Nacional debe de manera obligada, intensificar los operativos militares no solo en la subregión del Telembí que durante todo este año ha sido escenario de toda clase de episodios de violencia, sino en la costa pacífica en general.
En ese sentido no se puede olvidar que ya vamos a estar a escasos siete meses para la realización de las elecciones para el Congreso de la República, en las que el 13 de marzo de 2022, elegiremos al Senado y a la Cámara de Representantes, en tanto que en mayo serán los comicios para la Presidencia de la República.
Tampoco podemos olvidar que en las recientes elecciones para autoridades regionales que se llevaron a cabo el 27 de octubre de 2019, fue precisamente la costa pacífica de Nariño, la que presentó mayores inconvenientes en lo relacionado con episodios irregulares durante la realización del proceso electoral, con posibles casos de compras de votos e intimidación a los electores, lo que luego dio lugar a la presentación de varias demandas de nulidad electoral.
Por lo tanto, no podemos negar que nuestra costa es de alto riesgo y amerita con creces una Alerta Temprana como lo acaba de manifestar la Defensoría del Pueblo, ante los graves casos de desplazamientos que se vienen registrando desde hace dos meses, por lo que nos parece que esta llamada por parte de la Defensoría del Pueblo, tiene que tener una respuesta inmediata por parte del Gobierno Nacional y las autoridades, para enfrentar un conflicto que se presenta muy inquietante.
A consecuencia de la terrible situación que estamos viviendo en nuestra costa en lo que tiene que ver con las alertas tempranas en Nariño y también para enfrentar las delicadas situaciones que también se viven en otras 6 regiones del país, la Defensoría del Pueblo anunció la puesta en marcha de la Ruta de la Prevención, cuya base una mayor presencia institucional del Estado en las zonas afectadas.
Ojalá funcione, porque como se dice de manera popular, el asunto está color de hormiga y las soluciones no parecen funcionar.