De nuevo decidimos hoy volver a referirnos al tema del Covid-19, puesto que vemos con mucha preocupación que, en nuestra ciudad de Pasto, el tema de esta pandemia está siendo relegado a un tercer plano, lo que se refleja en un inquietante descuido en lo que tiene que ver con el seguimiento de los protocolos de bioseguridad.
Es cierto que en los actuales momentos los índices de contagio de la enfermedad han disminuido de manera considerable en nuestro medio, comportamiento que está a la par con las principales ciudades del país, donde también es notoria la baja de los casos y de los fallecimientos causados por la enfermedad.
Naturalmente esto es bueno y positivo, puesto que en los últimos meses ha permitido la reactivación de los diferentes sectores que fueron duramente golpeados por la pandemia a consecuencia de las medidas históricas que debieron adoptar las autoridades, como es el caso de los confinamientos, lo que se constituyó en un golpe brutal contra nuestra economía.
En lo que concierne a nuestra ciudad de Pasto, la reactivación a la que hacemos referencia se vive a plenitud, máxime en estos instantes, cuando nos encontramos a las puertas de las fiestas de Navidad, fin de año y en el caso de nuestra ciudad, de la celebración del Carnaval de Negros y Blancos.
«Ello nos debe mover a todos a no descuidar y, por el contrario, intensificar las medidas de bioseguridad, precisamente en esta temporada en la que todos estamos empeñados en la reactivación que, sobre todo para estos días finales del año, significa en nuestro medio la redención económica de miles de personas».
Eso está muy bien, pero nos preocupa bastante las informaciones que en los más recientes días se han venido recibiendo de diferentes regiones del país y también de diversos países de Europa, donde se coincide en que de manera lenta, pero segura, vienen aumentando los casos de contagio y también de muertes debido al Covid-19.
En ese sentido las autoridades de salud no descartan la posibilidad de que esté llegando el cuarto pico del virus, lo que a todos los colombianos nos debe poner en máxima alerta.
Igualmente nos parece que es muy conveniente que los pastusos, nariñenses y colombianos, nos miremos en el espejo que hoy nos muestran varias naciones de Europa, en las que luego de un receso de la enfermedad, como el que afrontamos hoy, vemos cómo, de acuerdo con el reporte de sus autoridades de sanidad, los casos de contagio y fallecimiento se han disparado de forma alarmante.
Se trata de situaciones que debemos tener muy en cuenta, puesto que nos muestran con claridad que el virus no se ha ido, como muchos lo piensan y como lo quisiéramos todos, sino que sigue circulando por doquier, lo que representa un enorme peligro.
Ello nos debe mover a todos a no descuidar y, por el contrario, intensificar las medidas de bioseguridad, precisamente en esta temporada en la que todos estamos empeñados en la reactivación que, sobre todo para estos días finales del año, significa en nuestro medio la redención económica de miles de personas.
En Pasto, gracias a un eficiente manejo por parte de la Administración municipal y las autoridades de salud, se ha alcanzado la inmunidad de rebaño, lo que, en sí, constituye una noticia muy positiva, en este permanente batallar contra la enfermedad.
Por ello reiteramos el llamado para que las personas que aún no han iniciado su proceso de vacunación, o les falta terminarlo, acudan de inmediato a los puestos de vacunación.
Hoy en día en nuestra ciudad este proceso no tiene ninguna dificultad, abundan los lugares de atención y se cuenta con vacunas de sobra para todas las personas que deseen inmunizarse. No olvidemos que luego de los difíciles días que se han afrontado debido a la pandemia, la vacuna es la mejor arma para seguir derrotando al virus.