Los once guacamayos azules que sobreviven en estado silvestre en Brasil dieron positivo a circovirus, una enfermedad altamente contagiosa que afecta el plumaje y el pico de las aves. La confirmación, realizada por el Instituto Chico Mendes de Conservación de la Biodiversidad (ICMBio), encendió las alarmas entre expertos en conservación, que ven en este brote una amenaza directa para la recuperación de la especie.
Un diagnóstico que pone a la especie al límite
El circovirus es conocido por provocar caída de plumas, deformaciones en el pico y un fuerte debilitamiento general. Aunque no afecta a humanos ni a aves de consumo, no existe cura ni tratamiento efectivo, lo que aumenta el riesgo de mortalidad en poblaciones pequeñas como la de los guacamayos azules.
El ICMBio explicó que los exámenes se realizaron luego de detectar comportamientos que sugerían una posible infección. Tras la captura de los once ejemplares, los resultados confirmaron los peores temores: toda la población silvestre está contagiada.
Aves repatriadas y una investigación en curso
Estos guacamayos fueron repatriados desde Europa y reintroducidos en Brasil en 2022 como parte de un programa internacional de recuperación. La detección del virus ocurrió a inicios de noviembre, cuando los equipos de conservación notaron señales clínicas que coincidían con circovirus.
Ahora, la principal incógnita es cómo ingresó la enfermedad a una población tan monitoreada. Por ello, el ICMBio abrió una investigación para rastrear el foco del contagio y evitar que se repita en futuras reintroducciones.
Sanciones por fallas en bioseguridad
Días antes del anuncio, el ICMBio había multado con 1,8 millones de reales brasileños al criadero BlueSky, responsable de 103 guacamayos, por no cumplir protocolos básicos de bioseguridad. La sanción refuerza las sospechas sobre posibles negligencias que podrían haber facilitado la introducción del virus.
La institución señaló que continuará evaluando los procedimientos del criadero y revisará las condiciones de manejo de las aves en cautiverio. El objetivo es evitar que fallas similares pongan en riesgo a otras especies vulnerables.
Un futuro incierto para el guacamayo azul
La especie, famosa por inspirar a la película Río, ya había sido declarada extinta en la naturaleza antes de este programa de reintroducción. La aparición del circovirus complica los esfuerzos y podría significar un nuevo retroceso para su supervivencia.
A pesar de ello, los especialistas mantienen la esperanza. Las aves se encuentran bajo observación estricta, y los equipos de conservación trabajan para contener el brote y proteger los proyectos de reproducción que continúan en curso.
Con todos los ojos puestos en la investigación, el futuro del guacamayo azul vuelve a depender de decisiones rápidas y medidas rigurosas que garanticen la seguridad sanitaria de la especie.