Por: Danny Alexander Ruales
Cuando se habla de la evolución tecnológica y de los cambios que puede traer este proceso, se está a la expectativa de que van a haber buenas y optimistas o malas y pésimas noticias. El avance en cuestiones de la comunicación y de la tecnología ha llevado a preguntarse actualmente, ¿qué pasará de aquí a 5 años con la humanidad?, cuestionamiento que antes se le atribuía a un periodo de tiempo más largo y poco probable, respuesta que al presente se vislumbra cada vez más cerca.
Ahora con el avance de la Inteligencia Artificial (IA) y sus nuevas herramientas de búsqueda y manipulación de datos surge un nuevo interrogante para muchas personas que han empezado a ser influenciadas o han visto lo que está ocasionando en la sociedad la experiencia de estas herramientas, y es: ¿cuál será el cuello de botella de este potencial manejo de la información?, que, como bien se sabe, la información “fluye a la velocidad de la luz”, llegando en cuestiones de segundos a las miradas de quién necesita estar actualizado, pero, ¿es ella la que en verdad se está buscando, necesitando o hay manipulación, un algo más?
La seguridad de la información y los alcances tan desenfrenados de las nuevas herramientas que manejan los datos codificados y los convierten en acciones tan útiles como el hacer tareas de escuela, manejo de montajes e imágenes como de mejorar las experiencias de usuario en la compra, venta de productos, han asombrado, maravillado a muchos pero de igual manera, han hecho que grandes países comiencen a cuestionarse y solicitar regulaciones inmediatas frente a este campo, necesarias, ¡claro que sí!, pero que se requieren tomar con un grado más de preocupación y conciencia, puesto que, si esto continúa así, el colapso de la información será inevitable en un futuro muy cercano.
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Con ello, no es generar miedos, ni frustraciones, ni menos desmeritar estos avances, antes, por el contrario, es invitar a seguir el desarrollo de los mismos, sus usos, pero cuestionándose la influencia que pueden tener, no “tragar entero” como se dice coloquialmente, tratar con cautela su manipulación, procurar velar por el respeto y responsabilidad en la información que se busca y se suministra en este nuevo campo que ha dado un gran salto al alcance de nuestras manos.
