El equipo de Médicos Sin Fronteras se encuentra en estos momentos en la cabecera municipal de la población, donde se hace una evaluación de las grandes necesidades que afrontan por lo menos 400 familias que tuvieron que salir de sus terruños a consecuencia de la violencia de los grupos armados ilegales.
En las últimas horas Médicos sin Fronteras denunció la terrible situación que afrontan en el municipio de Magüí, más de 400 familias que han sido desplazadas a consecuencia los enfrentamientos que sostienen grupos armados ilegales en las zonas rurales de Roberto Payán, Barbacoas y Magüí.
Es de anotar que el equipo de Médicos sin Fronteras se encuentra en estos momentos en la cabecera municipal de Magüí, en el proceso de la evaluación de necesidades y apoyando la respuesta en salud de la institucionalidad que requiere esta delicada emergencia.
De esta manera, la organización puso al descubierto una serie de enormes necesidades que afrontan cerca de dos mil personas entre hombres, mujeres y niños y niñas, quienes carecen de alimentación y un lugar digno donde dormir.
Durmiendo en el piso
De acuerdo con el reporte de Médicos sin Fronteras, en estos instantes, por lo menos 400 familias están en situación de desplazamiento en la cabecera municipal de Magüí, en unas condiciones tan difíciles que muchas de ellas, se están desplazando a Tumaco, Pasto, Cali y otras ciudades del país.
Lo cierto es que desde hace dos meses, la región del Telembí, en la costa pacífica de Nariño, afronta un grave caso de desplazamiento, considerado entre los dos más grandes del país, junto con el de Ituango, en el departamento de Antioquia.
En lo que corresponde a Magüí, el informe que acaban de entregar Médicos sin Fronteras, señala que las personas están durmiendo en el piso, arrinconados unos contra otros, sin colchones, mantas y sin ninguna clase de privacidad, en casas de familiares y amigos, lo que está dando lugar a impresionantes casos de hacinamiento.
Problemas de alimentación
En ese sentido se indicó que un número mínimo de familias, (unas diez) están durmiendo en el albergue habilitado para ese fin, lo que se constituye en una precaria solución a una problemática tan grande.
Igualmente, Médicos sin Fronteras, se refirió al grave hecho de que no hay alimentación para cantidades de familias, quienes se valen de la solidaridad de la población receptora, lo que ha dado lugar a una crisis social de proporciones, puesto que los moradores de Magüí, tienen sus propios problemas en materia de necesidades.
Grandes necesidades
Entre otras grandes necesidades a las que en las últimas horas han hecho referencia, Médicos sin Fronteras, se indicó que no hay acceso a agua potable.
Por esa razón, las familias están recogiendo agua del río o agua lluvia, por lo que se hace necesario generar más abastecimiento y potabilizar el agua que se ha almacenado.
Otra grave situación denuncia hace referencia a que no hay garantías de protección para las familias, muchos de cuyos integrantes han sido amenazados por los grupos alzados en armas, razón por la cual, sus vidas se encuentran en riesgo, sin que por ahora puedan contar con mecanismos de protección.
Tampoco se dispone de herramientas para sacar adelante los procesos de educación en emergencias y en síntesis, la queja generalizada que expresan los desplazados es que a pesar de las numerosas denuncias que se han hecho al respeto, los gobiernos departamental y nacional aún no han activado una respuesta inmediata para hacerle frente a esta dramática situación.
Enormes necesidades
En declaraciones a DIARIO DEL SUR, el alcalde de Magüí, Alejandro Juvenal Quiñónez, agradeció la gran colaboración que viene prestando Médicos sin Fronteras, en la atención a esta grave emergencia.
En torno a las necesidades se indicó que hacen falta por lo menos 1.200 colchonetas e igual número de mantas, hace como tanques de agua y sistemas de recolección.
Igualmente se requieren con suma urgencia, por lo menos 1.200 kits de higiene personal y 1200 kits de potabilización de agua, así como la activación de mecanismos de protección y educación en emergencias.
Al respecto, el alcalde Quiñónez, señaló que la situación en la cabecera municipal es bastante compleja, por lo que solicitó con urgencia la ayuda estatal, puesto que la capacidad de respuesta institucional está claramente desbordada.
“Solicitamos a las organizaciones que puedan apoyar la respuesta ponerse en contacto para empezar a llenar vacíos institucionales donde haga falta, y a aquellas organizaciones que tengan posibilidades de incidencia, hacer lo posible para activar la respuesta estatal urgentemente, expresó el mandatario municipal, quien reiteró que la situación es de extrema gravedad ante los miles de personas desplazadas que permanecen en la zona de Magüí, sin recibir ninguna clase de ayuda.
