1) Alta costura en alfombra roja
Vestidos estructurados de casas como Valentino o Armani Privé, con siluetas limpias y detalles artesanales. Hathaway domina el glamour clásico con un giro moderno.
2) Minimalismo sofisticado
Trajes sastre monocromos (negro, blanco o gris) que resaltan cortes impecables y demuestran que menos es más cuando hay buen diseño.
3) Romanticismo contemporáneo
Looks etéreos con transparencias, encajes y faldas vaporosas que actualizan el aire romántico sin caer en lo predecible.
4) Poder en clave masculina
Blazers oversize, camisas blancas y pantalones de pinzas: una estética andrógina que refuerza su imagen segura y actual.
5) El “little black dress”, reinventado
Desde versiones satinadas hasta asimetrías audaces, Anne muestra cómo un básico puede ser eterno y a la vez sorprendente.
6) Street style neoyorquino
Jeans rectos, camisetas básicas, gafas XL y trench coats. Cómodo, urbano y chic: su estilo fuera de cámara inspira a diario.
7) Audacia con color y textura
Apuesta por tonos vibrantes, metalizados o mezclas inesperadas que la mantienen a la vanguardia sin perder elegancia.
8) Elegancia relajada
Vestidos midi, flats y capas ligeras que prueban que el lujo también puede ser práctico y cercano.
¿La clave de su influencia? Versatilidad y coherencia: Anne Hathaway transita con naturalidad entre pasarelas y calles, marcando tendencias que se sienten alcanzables y atemporales.

