La aparición de la atleta colombiana Caterine Ibargüen, medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Brasil como candidata al Senado como cabeza de lista del Partido de La U, anuncio que hizo en compañía de la presidenta de este movimiento político, Dilian Francisco Toro, nos hace recordar de los deportistas que fueron aspirantes políticos y en algunos casos, lograron su objetivo de ser elegidos.
Aquí, en nuestro departamento de Nariño, tuvimos a dos candidatos, curiosamente ambos naturales de Tumaco, el futbolista Willington Ortiz y el atleta Silvio Salazar.
A la Cámara
El representante Ortiz, considerado como el mejor jugador colombiano en toda la historia, nació en Tumaco y en su fulgurante carrera deportiva, fue siempre integrante de la Selección Colombia y de equipos como Millonarios, América y Deportivo Cali, donde es recordado con un golazo que en Buenos Aires, le hizo a River Plate, en una histórica victoria 2-1 de los azucareros en un partido de Copa Libertadores de América.
Pues bien, en 2002, Willington se lanzó como candidato a la Cámara de Representantes por las comunidades afrocolombianas y fue elegido.
Sin embargo, no pudo cumplir con una buena gestión puesto que le tocó defender a toda costa su curul, puesto que tuvo problemas por las deudas que adquirió durante su campaña y se pidió que fuera retirado del Congreso por aparecer en la Lista Clinton, debido a su pasado en el América de Cali, en ese entonces propiedad de los hermanos Rodríguez Orejuela.
Pero a pesar de todos esos inconvenientes, al final pudo terminar su periodo.
Por su parte, el atleta tumaqueño, Silvio Salazar, también de una fulgurante carrera deportiva, en el mismo 2002 se lanzó al Congreso en representación de las negritudes, pero no alcanzó a ser elegido.
Otros aspirantes
En 1990 el reconocido político nariñense Antonio Navarro Wolff convenció al entrenador de la Selección Colombia, Francisco Maturana como aspirante por la Alianza Democrática M-19 a la Asamblea Nacional Constituyente.
Y, en efecto, fue elegido, pero su paso fue fugaz, porque él prefirió seguir de lleno su carrera deportiva como entrenador. Dijo “No más, yo en el fútbol y no más”, y se despidió de la política.
El éxito de María Isabel
Tal vez la deportista-política que tuvo mayor éxito fue María Isabel Urrutia. Ella fue la primera medallista de oro en unos Juegos Olímpicos para Colombia (Sídney 2000).
Solo 2 años después fue elegida representante a la Cámara por las negritudes y en 2006 la reeligieron por la Alianza Social Afrocolombiana.
Entre sus proyectos importantes fue autora de la ley que le otorga pensiones a los deportistas que logren importantes resultados a nivel internacional. En 2010 no fue reelegida, se lanzó a la Alcaldía de Cali y tampoco lo consiguió.
También fueron aspirantes al Congreso, el boxeador ‘Rocky’ Valdés y el ciclista ‘Lucho’ Herrera, en ese 2002 donde a muchos de nuestros deportistas les picó el bichito de la política, pero como se dice de manera popular, se «quemaron» y no fueron elegidos.
El famoso ‘Cochise’
El famoso ciclista colombiano Martín Emilio ‘Cochise’ Rodríguez, campeón mundial en 1971, fue elegido concejal de Medellín en el año 2003, en la lista del Partido Equipo Colombia, liderado por el senador Luis Alfredo Ramos.
‘Cochise’ nunca quiso ahondar en el tema, pero lo cierto es que luego de cumplir con su periodo, afirmó de manera categórica que no quería saber nada más de política.
Deseos frustrados
El exfutbolista y entrenador Hernán Dario ‘Bolillo’ Gómez iba a ser candidato a la Cámara de Representantes por el partido Conservador en 2009 y se arrepintió un mes después.
El arquero de la Selección Colombia en 2011 recogió firmas para ser candidato a la Alcaldía de Guarne pero renunció a su aspiración a los 3 meses.
El futbolista Bonner Mosquera en 2014 se lanzó a la Cámara de Representantes por el Partido Liberal y se «quemó» y lo mismo ocurrió con Harold Lozano quien también en el 2014 fue candidato a la Cámara de Representantes por la Fundación Afrocolombianos en Acción y no lo consiguió.
Otros fracasos
También fracasaron en sus incipientes carreras políticas, Andrés ‘Michi’ Sarmiento quien por el partido Opción Ciudadana se lanzó al Concejo de Bucaramanga y no logró la votación. Lo mismo le pasó a Vladimir Marín, al aspirar al Concejo de Rionegro en 2015 cuando seguía siendo jugador activo por la Alianza Social Independiente. Apenas alcanzó 44 votos.
De otro lado, el ciclista Jarlinson Pantano se lanzó al Concejo de Cali en 2019 por el partido de la U y no pudo ganar. Lo mismo ocurrió con Jamell Ramos quien en 2019 fue candidato al Concejo de Sabaneta por el partido Somos Sabaneta y con 407 votos no le alcanzó y con Martín Arzuaga, candidato al Concejo de Barranquilla por Cambio Radical en 2019 pero no le fue bien.