Te nos fuiste antes de tiempo Andrés, y así sin avisar y sin entender por qué. Hoy estamos tristes y consternados por tu partida.
Con el pasar del tiempo en este lugar nos vamos convirtiendo en familia, de esas que a veces tienen problemas, regaños, peleas, pero al final terminamos juntos con la satisfacción del deber cumplido. No puedo explicar los miles de sentimientos que tenemos en la oficina, tal vez siempre miramos desde lejos las tragedias y hoy cuando nos toca a nosotros el sentimiento y el dolor es diferente.
Puedo asegurar que vamos a extrañarte, que tus locuras, tus gritos y tu particular y única forma de ser estará por siempre en nuestros corazones. Solo Dios sabrá por qué quiso llevarte tan pronto, cuando la verdad era que tenías toda una vida por delante y, lo más importante, esas ganas locas de querer ser mejor y hacer feliz a tu familia.
Vuela tan alto como Dios lo permita y allá, acompañado de tu abuelita, sé muy feliz. Nos dejas con un vacío inmenso en esta casa editorial porque, a pesar de las diferencias, éramos familia.
Andrés, esto no es más que un hasta pronto y una forma de recordar que alguna vez el destino nos cruzó y nos hizo compartir alrededor de 5 años de aprender juntos, de salir adelante. Conocí tu trabajo, tu entrega y compromiso y esas son las cosas que hoy nos quedan.
Estamos tristes por tu partida y de todo corazón acompañamos a tu familia y seres más queridos. Sé la fortaleza para que ellos puedan entender esta pérdida y acompáñanos siempre desde donde te encuentres.
El destino se encargará de poner las cosas en orden y ojala tu partida sea la excusa para que ante todo se piense en el respeto a la vida. No podemos seguir permitiendo que el ser un aficionado por la bicicleta sea un riesgo. No es justo que hoy en día salir a hacer deporte sea un peligro. Que tu historia sea la voz de todos los nariñenses para que se genere conciencia de las normas y el respeto por los biciusuarios. Sea ese llamado de urgencia para que las autoridades hagan respetar las señales y principalmente que los conductores entiendan que ante todo primero está la vida.
No te digo adiós porque sé que vamos a volver a encontrarnos, pero sí agradezco el haber estado en esta locura diaria de hacer el DIARIO DEL SUR y de regalarnos ocurrencias todos los días para ser felices. Que ahora que estás junto a tu ‘mamita’, como le decías, puedas ser feliz y de parte de toda esta gran familia siempre te recordaremos. ¡Vuela alto Andrés Legarda!
Por: Claudia Zambrano Erazo

