El expresidente Álvaro Uribe Vélez abrió la posibilidad de que el Centro Democrático no participe en la consulta interpartidista prevista para el 8 de marzo de 2026, sumando incertidumbre a la estrategia de la oposición frente a la candidatura del gobierno.
En una entrevista con medios nacionales, Uribe afirmó que si la oposición llega fragmentada y no se logra una verdadera unidad entre las distintas corrientes políticas contrarias al petrismo, su colectividad podría retirarse del mecanismo de consulta para elegir un candidato único.
El expresidente explicó que, ante la proliferación de aspirantes y la falta de acuerdos concretos, el Centro Democrático evalúa seleccionar a su representante mediante una encuesta interna en lugar de participar en una consulta más amplia con otros partidos y movimientos. Según Uribe, este método permitiría evitar la dispersión del voto de la derecha y centroderecha, una preocupación que ha surgido ante la gradual confirmación de candidaturas independientes.
La propuesta de Uribe surge en un contexto en el que figuras como Sergio Fajardo y Abelardo de la Espriella han descartado participar en una consulta interpartidista, optando por competir directamente en la primera vuelta. Esta situación ha generado divisiones dentro del espectro opositor y ha llevado a varios sectores a replantear sus estrategias electorales de cara a las presidenciales de 2026.
A pesar de la posible retirada de la consulta, Uribe insistió en que el Centro Democrático continuará su proceso interno para elegir entre las precandidatas María Fernanda Cabal, Paloma Valencia y Paola Holguín a través de encuestas, aunque no descartó la posibilidad de mantener más de un aspirante hasta febrero.
Este anuncio pone de manifiesto las tensiones internas dentro de la oposición y plantea un desafío adicional para consolidar una candidatura fuerte que compita en primera vuelta y tenga opciones reales en el calendario electoral del próximo año.