La justicia ha dado un paso importante en el caso del homicidio ocurrido el 8 de abril de 2022, cuando Nixon Alejandro Quenan Mosquera fue condenado a 8 años y 6 meses de prisión. La Fiscalía General de la Nación presentó el caso ante un juez de ejecución de penas, quien dictó la sentencia por los delitos de homicidio agravado y fabricación, tráfico, porte o tenencia de armas de fuego, accesorios, partes o municiones.
Los hechos que llevaron a esta condena se desarrollaron en un taller de mecánica, donde Nixon Quenan Mosquera ingresó con una clara intención de violencia. Según la investigación, Quenan Mosquera llegó al taller y, sin mediar palabra alguna, se dirigió directamente a la víctima, cuyo nombre no ha sido revelado públicamente. En un acto de extrema violencia, le propinó varios disparos que resultaron fatales.
Graves heridad
El ataque fue ejecutado con precisión y sin aviso previo, lo que dejó a la víctima sin oportunidad de defenderse o escapar. Los compañeros de trabajo de la víctima, sorprendidos y angustiados, intentaron prestarle auxilio de inmediato. A pesar de sus esfuerzos y de la rapidez con la que buscaron ayuda, las heridas infligidas por los disparos fueron demasiado graves, y la víctima falleció en el mismo lugar del ataque.
Después de cometer el crimen, Nixon Quenan Mosquera huyó de la escena, intentando evadir las consecuencias de sus actos. Sin embargo, las investigaciones de las autoridades pronto dieron con su paradero. Las pruebas recopiladas, incluyendo testimonios y evidencias del uso del arma de fuego, confirmaron su responsabilidad en el crimen.
El proceso judicial concluyó con la sentencia definitiva que Quenan Mosquera deberá cumplir en la cárcel distrital de Pasto. La sentencia de 8 años y 6 meses de prisión se considera un paso hacia la justicia para la familia de la víctima y para la comunidad que quedó conmocionada por la brutalidad del ataque.
Autoridades locales
Este caso resalta la importancia de la respuesta judicial en casos de violencia armada y la necesidad de garantizar que los responsables de tales actos enfrentan las consecuencias legales correspondientes. La Fiscalía General de la Nación, junto con las autoridades judiciales, ha reafirmado su compromiso con la justicia y con la protección de los derechos de las víctimas en Nariño. El asesinato en el taller mecánico ha dejado una marca profunda en la comunidad local, que ahora debe enfrentar la realidad de la pérdida y la violencia que afectó a uno de sus miembros. Mientras Nixon Quenan Mosquera inicia su condena en la cárcel distrital de Pasto, la comunidad y la familia de la víctima continúan lidiando con el dolor y la búsqueda de justicia que este trágico evento ha suscitado.