En una emotiva y significativa ceremonia, la Universidad de Nariño la graduación de una nueva cohorte de estudiantes del programa en Auxiliar de Enfermería, quienes se preparan para iniciar su camino en el ámbito profesional. El evento, fue el reflejo de años de esfuerzo, dedicación y compromiso por parte de los graduados, quienes, al mismo tiempo, se muestran listos para afrontar los desafíos de un sector de salud que requiere de profesionales capacitados y con vocación de servicio.
Logro
La ceremonia estuvo presidida por la rectora de la Udenar, Martha Sofía González, quien en su discurso resaltó la importancia de la formación académica recibida por los estudiantes, destacando que este logro no solo marca el final de una etapa educativa, sino que es el punto de partida para una vida profesional dedicada al bienestar de la comunidad.
La rectora expresó su satisfacción por los resultados alcanzados por el programa de Auxiliar de Enfermería, que ha formado a cientos de profesionales comprometidos con la salud pública y el cuidado de los pacientes.
«Este es un momento muy especial para todos nosotros, ya que no solo celebramos el esfuerzo y la dedicación de cada uno de los graduados, sino también la oportunidad de contribuir al fortalecimiento del sector salud en nuestra región. El compromiso de la Udenar con la educación de calidad es inquebrantable, y hoy reafirmamos nuestro papel como formadores de los mejores profesionales, quienes serán el pilar fundamental para el desarrollo y bienestar de nuestra comunidad», señaló González.
Participación
La ceremonia contó con la participación de autoridades académicas, docentes, familiares y amigos, quienes acompañaron a los graduados en este importante logro. La emoción se reflejaba en los rostros de los estudiantes, quienes, después de años de esfuerzo y sacrificio, pudieron ver el fruto de su dedicación.
El programa de Auxiliar de Enfermería de la Universidad de Nariño ha sido reconocido por su calidad educativa y su enfoque en la formación integral de los estudiantes. A lo largo de su formación, los estudiantes no solo adquieren los conocimientos técnicos y científicos necesarios para ejercer su trabajo, sino también habilidades humanas, éticas y sociales que les permitirán brindar un servicio de calidad, enfocado en el bienestar de los pacientes y en la promoción de la salud en la región.