En el Pacífico nariñense, se gesta un proyecto sin precedentes: la transformación del puerto de Tumaco en el primer Puerto Azul de Colombia. Esta ambiciosa iniciativa representa mucho más que una infraestructura marítima; es un modelo de desarrollo sostenible, dignidad económica y construcción de paz territorial que nace en el océano y se proyecta hacia el mundo.
El Puerto Azul es una propuesta liderada por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), en articulación con el Gobierno Nacional, regional y local, y con el respaldo de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID). Su propósito es acompañar a los puertos pesqueros mediante procesos de capacitación, desarrollo de herramientas productivas y ejecución de proyectos que generen valor, riqueza y bienestar para las comunidades costeras.
Impacto
Más allá de su función logística, el puerto de Tumaco busca convertirse en un verdadero motor de cambio. Su impacto se proyecta en tres niveles clave: social, económico y ambiental. En lo social, busca empoderar a las comunidades pesqueras, promoviendo el trabajo digno, la igualdad de género y la cohesión territorial.
Todo esto, en consonancia con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de las Naciones Unidas, específicamente con aquellos orientados a erradicar la pobreza, garantizar la seguridad alimentaria y fomentar el trabajo decente.
La construcción del Puerto Azul ha sido posible gracias a un proceso de diálogo incluyente y multiactor, liderado por la FAO, la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID) y el Gobierno Nacional, cuya primera fase contempla una inversión superior a 40 mil millones de pesos.
Fortalecer
Para más de 4.000 familias que viven de la pesca artesanal y de actividades conexas como la recolección de conchas, pela de camarón, gastronomía y el trabajo en cooperativas, este proyecto representa una oportunidad de generar más de 3.500 empleos directos y cerca de 15.000 empleos indirectos, fortalecer la economía local, la exportación directa y la empleabilidad como estrategias de paz territorial.
Así lo señaló la gerente de Pacifimar, Adriana González Quiñones: “Algo que ha marcado la tasa de desempleo es la falta de oportunidades, lo que ha llevado a que muchos terminen vinculados a grupos armados. Con este proyecto forjamos una línea real de paz”.
Por su parte, la viceministra de Infraestructura, Liliana María Ospina Arias, quien participó del comité técnico y la firma de la declaración de intenciones, liderado en el Distrito, reiteró el compromiso del Gobierno Nacional con la transformación del puerto.
Visibilizar
“Estamos trabajando conjuntamente entre las asociaciones y cooperativas de las comunidades de pescadores, el Gobierno, Gobernación de Nariño, Alcaldía del Distrito de Tumaco y el acompañamiento de la FAO y la Agencia de Cooperación Española, con el fin de definir un plan de trabajo y que este puerto de Tumaco se convierta en una realidad, en un Puerto Azul”, expresó la funcionaria.
El proyecto del Puerto Azul fue presentado en octubre de 2024 durante el Foro Mundial de Inversiones, en Roma, como una estrategia que busca atraer recursos y visibilizar la apuesta del Pacífico colombiano en el contexto internacional. La propuesta está orientada a generar impactos positivos en tres dimensiones fundamentales: el desarrollo económico local, el bienestar comunitario y la sostenibilidad ambiental.

