Tiroteo en fiesta judía en Australia deja 11 muertos y decenas de heridos en Bondi Beach

Un grave ataque armado ocurrió durante la celebración de Janucá en la playa de Bondi Beach, en la ciudad de Sídney, Australia, dejando un saldo de al menos once personas muertas y 29 heridas. El hecho se registró el domingo 14 de diciembre de 2025 durante el evento comunitario “Chanukah by the Sea”, al que asistían cerca de mil personas, en su mayoría miembros de la comunidad judía. Las autoridades australianas calificaron el ataque como un acto terrorista y un hecho de antisemitismo dirigido específicamente contra dicha comunidad.

Según los reportes oficiales, dos atacantes armados abrieron fuego de manera indiscriminada contra los asistentes en plena celebración religiosa. Uno de los agresores murió durante el ataque, mientras que el segundo fue trasladado en estado crítico. Posteriormente, la policía encontró artefactos explosivos improvisados dentro de un vehículo relacionado con uno de los atacantes, lo que elevó aún más la gravedad del atentado y reforzó la hipótesis de un acto planificado.

El primer ministro de Australia, Anthony Albanese, condenó enérgicamente el ataque y lo describió como “un acto de maldad, antisemitismo y terrorismo”. En sus declaraciones, también destacó el valor y el heroísmo de algunos ciudadanos que intervinieron para enfrentar a uno de los atacantes, lo que habría evitado que el número de víctimas fuera aún mayor.

Bondi Beach, uno de los lugares más turísticos y concurridos del país, se transformó en una escena de pánico y desolación. Testigos relataron que los disparos fueron constantes y generaron una estampida de personas que intentaban huir para salvar sus vidas. El césped y las inmediaciones de la playa quedaron cubiertos de objetos personales abandonados, mientras los equipos de emergencia atendían a los heridos directamente en la vía pública. Las llamadas de auxilio comenzaron a recibirse a las 6:47 de la tarde, y al llegar al lugar, la policía encontró múltiples víctimas, armas y una escena marcada por la violencia extrema.

Algunos testigos describieron la presencia de sangre por todas partes y el fuerte impacto emocional que dejó el atentado tanto en residentes como en turistas. Robert Gregory, jefe de la Asociación Judía de Australia, afirmó que esta tragedia era “completamente previsible” y criticó duramente al Gobierno por no haber tomado medidas más firmes para proteger a la comunidad judía, pese a antecedentes recientes de ataques y amenazas.

En el contexto más amplio, Australia ha registrado un aumento significativo de actos antisemitas desde el inicio del genocidio palestino perpetrado por Israel, incluyendo incendios provocados contra espacios vinculados a la comunidad judía en ciudades como Sídney y Melbourne. El primer ministro Albanese señaló que algunos de esos ataques previos habrían sido dirigidos desde Irán, aunque aclaró que no dejaron víctimas fatales.

En conjunto, el atentado en Bondi Beach representa uno de los episodios de violencia más graves en la historia reciente de Australia y ha reabierto el debate sobre la seguridad, el terrorismo y la protección de las minorías religiosas, dejando a la sociedad australiana profundamente conmocionada y en estado de duelo.