Tensión global: Irán responde al ataque con una amenaza al petróleo mundial

Tensión global: Irán responde al ataque con una amenaza al petróleo mundial

Irán se encuentra al borde de una represalia estratégica. Su Parlamento aprobó el cierre del estrecho de Ormuz, una ruta vital por donde circula casi el 20 % del petróleo del planeta. Esta decisión surge después de que Estados Unidos bombardeara tres de sus instalaciones nucleares más importantes: Fordow, Natanz e Isfahán. Tensión global: Irán responde al ataque con una amenaza al petróleo mundial.

El Consejo Supremo de Seguridad Nacional de Irán aún debe dar luz verde, pero la amenaza es clara. Un cierre efectivo del estrecho provocaría un impacto inmediato en los precios del petróleo y del gas natural licuado. Los mercados ya reaccionan con temor a una posible interrupción del flujo energético desde Medio Oriente.

Washington presume victoria; Tensión global: Irán responde al ataque con una amenaza al petróleo mundial

El secretario de Defensa de EE.UU., Pete Hegseth, declaró que las «ambiciones nucleares de Irán han quedado pulverizadas». El presidente Donald Trump celebró la operación como una victoria militar. Sin embargo, Irán dejó claro que no volverá a negociar hasta ejecutar una respuesta proporcional.

El Fordo, una de las instalaciones nucleares en Irán atacada por EE.UU.

Irán lanzó misiles hacia Israel en las horas siguientes al ataque. El ministro de Exteriores, Abbas Araghchi, afirmó que responderán “según su derecho a la legítima defensa”. Además, solicitó una reunión urgente en el Consejo de Seguridad de la ONU para condenar lo que calificó como un “acto ilegal”.

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El mundo observa: posible cierre de Ormuz puede detonar crisis energética

Cualquier acción sobre Ormuz afectará directamente a países como Arabia Saudita, Emiratos Árabes Unidos, Qatar y Kuwait. Arabia Saudita solo podría exportar la mitad de su producción de petróleo si Irán ejecuta el cierre.

Cierre de estrecho de Ormuz puede desatar una crisis mundial energética.

China ya condenó el ataque estadounidense y advirtió sobre una escalada que podría arrastrar a la región y al mundo a un conflicto prolongado. Israel, por su parte, elogió la ofensiva, mientras que Irán, humillado pero aún armado, evalúa múltiples formas de contraataque.