Tuluá, Valle del Cauca (18 de diciembre de 2025) – En un hecho que ha conmocionado al país, Gilberto Jesús Calao González, director seccional de la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (DIAN) en Tuluá, fue asesinado en un ataque sicarial ocurrido en la mañana de este jueves 18 de diciembre mientras se dirigía a su lugar de trabajo en el sur del municipio del Valle del Cauca.
Las autoridades informaron que el ataque se produjo alrededor de las 7:15 a. m. en el barrio El Jazmín, en la intersección de la calle 30 con carrera 42, cuando Calao González se movilizaba en su vehículo particular. Dos hombres armados que se desplazaban en motocicleta lo interceptaron y abrieron fuego en repetidas ocasiones, provocándole heridas letales que causaron su muerte en el sitio.
Respuesta de las autoridades y del Estado
La Policía Nacional y la Fiscalía General de la Nación desplegaron de inmediato un plan candado y operativos en varios sectores del municipio para perseguir a los responsables y recolectar evidencias. Hasta el momento no se han reportado capturas ni se han establecido móviles claros del crimen.
En un comunicado oficial emitido desde Bogotá, la DIAN lamentó profundamente la muerte de su director seccional, expresó solidaridad con su familia, amigos y compañeros de trabajo, y rechazó categóricamente todo acto de violencia. Además, la entidad anunció que declara duelo institucional en la sede seccional de Tuluá, motivo por el cual las citas programadas para este jueves fueron reprogramadas.
Según el comunicado institucional, Gilberto Jesús Calao González era abogado de profesión, oriundo de Lorica (Córdoba), con especializaciones en Administración Pública e Instituciones Jurídicas de la Seguridad Social, y contaba con 16 años de trayectoria en la DIAN. Había asumido la dirección seccional de Tuluá el 27 de agosto de 2025, donde se destacó por su compromiso institucional, liderazgo y amplia experiencia técnica.
Investigación y contexto de seguridad
Las autoridades judiciales indicaron que el caso se encuentra en etapa de investigación activa, centrada en esclarecer las circunstancias de tiempo, modo y lugar del ataque, así como la posible identificación de los autores materiales e intelectuales. Por ahora, no hay hipótesis confirmada sobre si el homicidio está relacionado directamente con sus funciones profesionales, aunque las investigaciones buscan determinarlo.
Este hecho se produce en un contexto de alerta por los constantes episodios de violencia y sicariato que afectan a Tuluá y otras regiones del Valle del Cauca, en medio de tensiones entre estructuras criminales y el aumento de hechos delictivos que atentan contra la seguridad de servidores públicos y ciudadanos.
Reacciones y acciones posteriores
Autoridades locales y nacionales han condenado el asesinato y pedido a la ciudadanía colaborar con información que permita avanzar en el esclarecimiento del caso. El alcalde de Tuluá, junto con las fuerzas de policía, ha sugerido la posible oferta de recompensas para capturar a los implicados, aunque esta medida aún está en evaluación.
El crimen del director seccional de la DIAN en Tuluá genera preocupación sobre la protección de los funcionarios públicos, la seguridad institucional y la capacidad de las autoridades para enfrentar los niveles de violencia que persisten en varias zonas de Colombia.

