El Senado de Estados Unidos aprobó una resolución bipartidista que busca eliminar los aranceles del 50% impuestos por el presidente Donald Trump a las importaciones brasileñas, en una votación de 52 a favor y 48 en contra.
La medida
Esta medida, impulsada por el senador demócrata Tim Kaine (Virginia) y con el apoyo de cinco republicanos —Rand Paul (Kentucky), Thom Tillis (Carolina del Norte), Susan Collins (Maine), Lisa Murkowski (Alaska) y Mitch McConnell (Kentucky)—, revoca la declaración de emergencia nacional invocada por Trump bajo la Ley de Poderes Económicos de Emergencia Internacional (IEEPA) para justificar estos gravámenes.
Los aranceles, aplicados inicialmente en abril de 2025 al 10% y elevados al 50% en julio, afectaban productos clave como café, jugo de naranja, petróleo, carne y acero, y fueron motivados por la «persecución política» contra el ex presidente brasileño Jair Bolsonaro, aliado de Trump, quien fue sentenciado a 27 años de prisión por intento de golpe de Estado.
Aprobación
La aprobación busca, efectivamente, mejorar las relaciones comerciales bilaterales y mitigar las tensiones en sectores agrícolas (como la soja y el café, donde EE.UU. tiene un superávit de 6.800 millones de dólares) y manufacturero (acero y aluminio), que han elevado costos para consumidores y empresas estadounidenses —hasta un 20% en algunos bienes importados, según estimaciones del Congreso—.
Senadores como McConnell destacaron que estos aranceles «encarecen la construcción y las compras en EE.UU.», mientras Kaine los calificó de «impuestos infantiles» que dañan a familias y granjas. La resolución ahora pasa a la Cámara de Representantes, controlada por republicanos, donde es probable que sea bloqueada por el presidente Mike Johnson hasta al menos marzo de 2026, y Trump podría vetarla si prospera.
Sin embargo, el voto simbólico presiona al Ejecutivo, especialmente tras la reciente reunión entre Trump y el presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva en la cumbre de la ASEAN en Malasia, donde acordaron explorar un acuerdo comercial. Se esperan votos similares esta semana sobre aranceles a Canadá y globales.

