La tormenta tropical Melissa se ha formado este martes en el mar Caribe, activando alertas meteorológicas en varias islas caribeñas y marcando un nuevo episodio para la temporada atlántica de huracanes.
Según los últimos informes, Melissa presenta vientos máximos sostenidos de alrededor de 80 km/h (50 mph) y se encuentra aproximadamente a 300-500 km al sur de Puerto Príncipe, Haití.
Los pronósticos indican que podría fortalecerse en los próximos días hasta alcanzar la categoría de huracán, debido al ambiente cálido del océano y a condiciones meteorológicas favorables.
Se han emitido las siguientes alertas:
- Vigilancia de huracán para la península sur de Haití, incluyendo el área de Puerto Príncipe.
- Vigilancia de tormenta tropical para Jamaica.
Las zonas más vulnerables, especialmente Haití y República Dominicana, podrían recibir lluvias acumuladas de entre 13 y 25 cm durante los próximos días, lo que aumenta significativamente el riesgo de inundaciones repentinas, deslizamientos de tierra y marejadas costeras.
Otras islas como Aruba, Puerto Rico y Jamaica podrían experimentar lluvias más ligeras de entre 2,5 y 8 cm, junto con oleaje elevado y vientos moderados.
Aún persiste incertidumbre en cuanto a su trayectoria exacta: algunos modelos sugieren que podría virar hacia el norte y afectar directamente Haití o República Dominicana, mientras otros indican un desplazamiento más al oeste, hacia Jamaica o Cuba. La velocidad de desplazamiento también podría disminuir, lo que prolongaría su impacto en tierra.
Las autoridades locales y regionales han comenzado ya a tomar medidas preventivas, instando a la población a estar alerta, asegurar sus propiedades y prepararse para lluvias intensas, vientos fuertes y la eventual interrupción de servicios básicos. Esta formación refuerza además que la temporada de huracanes del Atlántico aún no ha concluido, pese a acercarse al final de octubre.
Se recomienda a los residentes de las zonas en alerta mantenerse atentos a los avisos oficiales, adoptar medidas de protección personal y revisar rutas de evacuación, en caso de que la tormenta continúe intensificándose o cambie de rumbo.