Bogotá, 27 de diciembre de 2025 — Las recientes declaraciones del economista y exministro colombiano Luis Carlos Reyes han reavivado el debate político en Colombia tras la inscripción de un comité ciudadano que busca recolectar firmas para convocar una Asamblea Nacional Constituyente. Reyes, quien fue director de la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (DIAN) y ministro de Comercio, Industria y Turismo durante el Gobierno del presidente Gustavo Petro, emitió una fuerte crítica hacia la iniciativa y la gestión gubernamental en general.
En un mensaje publicado en su cuenta oficial en la red social X, Reyes cuestionó la necesidad de reformar la Constitución de 1991 como respuesta a las dificultades que enfrenta el Ejecutivo. Según él, “la Constitución no frenó la implementación del programa de Gobierno”, sino que los problemas se originan en fallas administrativas y en la apertura a prácticas de corrupción, factores que a su juicio han obstaculizado la gestión pública.
🔍 Críticas a la propuesta de Constituyente
La inscripción oficial del comité impulsor de la Constituyente, realizada el 26 de diciembre ante la Registraduría Nacional, exige reunir alrededor del 5 % del censo electoral —aproximadamente dos millones de firmas— para que la iniciativa pueda presentarse ante el Congreso durante la legislatura que iniciará en julio de 2026. Esta propuesta ha generado diversas posturas entre sectores políticos, académicos e institucionales.
Reyes advirtió que sectores políticos como el “Frente Amplio” y el “Pacto Amplio” estarían detrás de la Constituyente con el objetivo de recuperar protagonismo político y retrasar el progreso del país. Para él, estos grupos podrían estar usando el proceso como herramienta política más que como mecanismo de transformación.
📉 Distinción entre problemas constitucionales y administrativos
En su pronunciamiento, Reyes fue enfático en separar las deficiencias del Gobierno de los límites del marco constitucional vigente. Su postura es que la Carta Política de 1991 aún ofrece mecanismos suficientes para realizar reformas profundas a través del Congreso, sin necesidad de abrir un proceso constituyente completo. Esta visión coincide con las críticas de otros sectores que consideran que la Constituyente es innecesaria y podría introducir más incertidumbre política.
🔄 Contexto político y respuestas
El presidente Gustavo Petro y algunos de sus ministros han defendido la iniciativa como un ejercicio de democracia participativa, aunque han reiterado que la decisión final sobre la convocatoria —si se logra avanzar— recaerá en el Congreso. Esta postura ha sido objeto de debate en redes sociales y entre líderes políticos que ven en la Constituyente una oportunidad para transformar el modelo institucional, mientras otros la perciben como una respuesta a la crisis de gestión del Ejecutivo.
La discusión política alrededor de la Constituyente se enmarca dentro de un contexto más amplio de críticas a la administración estatal actual, donde figuras de la oposición también han señalado problemas de manejo de recursos públicos, seguridad y servicios básicos.

