Londres / Bogotá — 17 de diciembre de 2025: La empresaria colombiana Zulma Guzmán Castro, de aproximadamente 54 años, fue localizada y rescatada en la mañana del martes 16 de diciembre en el río Támesis, cerca del puente de Battersea, en Londres, por agentes de la Policía Metropolitana, luego de recibir una llamada por una mujer en aparente situación de peligro. Guzmán se encontraba en el agua cuando la Unidad Policial Marítima la sacó y fue trasladada a un hospital, donde fue atendida; su estado no representaba riesgo vital, según las autoridades británicas.
La captura ocurre tras una búsqueda internacional coordinada por Interpol y la Fiscalía General de la Nación de Colombia, que emitieron una circular roja para su captura por su presunta implicación en el envenenamiento con talio que causó la muerte de dos niñas y lesionó a otras dos personas en Bogotá en abril de 2025.
Los hechos de abril de 2025
El caso se remonta al 3 de abril de 2025, cuando tres estudiantes del colegio Los Nogales de Bogotá se reunieron en una vivienda al norte de la capital. Un paquete con frambuesas cubiertas de chocolate, enviado como un supuesto “regalo” a través de mensajería, fue consumido por las menores. Las frutas estaban contaminadas con talio, un metal pesado altamente tóxico que puede causar intoxicación grave e incluso la muerte en dosis pequeñas.
Dos de las niñas, Inés de Bedout (14 años) y Emilia Forero (13 años), murieron días después de ingerir las frutas envenenadas; los fallecimientos se produjeron el 5 y 9 de abril de 2025 tras presentar graves síntomas de intoxicación. Además, otras dos personas que consumieron las frambuesas fueron hospitalizadas: una menor de edad y un joven de 21 años, que lograron sobrevivir tras recibir atención médica.
Investigación y sospechas
Las autoridades colombianas establecieron que la intoxicación no fue un accidente. Tras una investigación que incluyó análisis toxicológicos, se confirmó la presencia deliberada del talio en las frambuesas, lo que convirtió el caso en un homicidio premeditado.
Los investigadores señalan vínculos personales entre Guzmán y la familia De Bedout: la principal hipótesis apunta a un conflicto pasional y una relación extramatrimonial que Guzmán habría sostenido años antes con el padre de una de las niñas fallecidas, lo que habría desencadenado la planificación del envío del veneno.
Fuga internacional y arresto en Londres
Tras los hechos y la apertura de la investigación, Guzmán habría salido de Colombia el 13 de abril de 2025, desplazándose por Argentina, Brasil, España y finalmente al Reino Unido, donde llegó alrededor del 11 de noviembre. Su ubicación fue posible gracias a la colaboración internacional, análisis de comunicaciones y seguimiento de itinerarios, que llevaron a las autoridades a emitir una orden de detención internacional.
El rescate en el río Támesis y la posterior ubicación de Guzmán se produjeron en el marco de esta cooperación global entre la Policía Metropolitana de Londres, la Agencia Nacional contra el Crimen (NCA) del Reino Unido, Interpol y la Fiscalía colombiana.
Estado actual del proceso judicial
Por ahora, Guzmán permanece hospitalizada en Londres debido a su condición médica tras el incidente en el río. Las autoridades británicas han indicado que una vez reciba el alta, evaluarán su detención formal para iniciar el proceso de extradición hacia Colombia, donde enfrentaría cargos por homicidio, tentativa de homicidio y otros delitos asociados al uso de sustancias venenosas.
Los familiares de las víctimas esperan que, una vez en Colombia, Guzmán sea imputada ante un juez y, de resultar culpable, enfrente una pena que podría superar los 50 años de prisión, según expectativas de los abogados de las familias afectadas.

