Durante el segundo semestre de 2025, el comercio minorista en Colombia mostró señales claras de recuperación, impulsado principalmente por el aumento del consumo interno. Sectores como alimentos, bebidas, artículos de uso personal y tecnología registraron un crecimiento sostenido en ventas, apoyado por la desaceleración de la inflación y una mayor estabilidad en los precios de productos básicos.
Este comportamiento estuvo acompañado por estrategias de descuentos, ampliación del comercio electrónico y una mayor penetración de medios de pago digitales, especialmente en ciudades intermedias. Aunque el consumo aún no alcanza los niveles previos a la pandemia en todos los segmentos, el balance general refleja una mejora en la confianza de los hogares y una reactivación progresiva del comercio formal.