La capital nariñense se ha convertido en un escenario de transformación social gracias a la implementación del programa Renta Joven, que busca brindar un incentivo económico a los estudiantes y mejorar sus condiciones de vida y académicas.
Actualmente, más de 500 jóvenes se han sumado a esta iniciativa, que no solo promueve el desarrollo personal, sino que también les permite participar en actividades de voluntariado.
Miriam Benavides, enlace municipal del programa, destacó que “el programa tiene un enfoque que se llama voluntariado, el cual el municipio de Pasto fue piloto en este año”.
Estrategia
Esta estrategia, que surge como continuidad de la iniciativa anterior, Jóvenes en Acción, tiene como objetivo garantizar la permanencia educativa de cientos de estudiantes.
Los jóvenes que participan en el voluntariado reciben una bonificación económica por parte del Gobierno Nacional tras cumplir con las labores asignadas. Este apoyo es fundamental para que los estudiantes puedan consolidar sus procesos formativos y minimizar el riesgo de deserción escolar.
Los beneficiarios han manifestado que esta experiencia no solo les ha proporcionado un alivio económico, sino que también les ha permitido desarrollar habilidades cruciales en áreas como la empatía, la solidaridad, la comunicación y el liderazgo.
Formación
Renta Joven se perfila como una herramienta clave para enfrentar los desafíos que enfrentan los estudiantes nariñenses, asegurando que tengan las condiciones necesarias para continuar con su educación y contribuir al desarrollo de su entorno.
En un momento en que la inversión en educación es más crucial que nunca, iniciativas como esta ofrecen esperanza y oportunidades para una generación en búsqueda de un futuro mejor.