La inseguridad en los alrededores de los colegios de la localidad de Bosa ha generado preocupación entre estudiantes, padres de familia y docentes, quienes han denunciado constantes robos y hechos violentos que ponen en riesgo la integridad de la comunidad educativa. Ante esta alarmante situación, las autoridades han decidido reforzar la vigilancia en la zona con el fin de brindar mayor seguridad a los menores y evitar que sigan siendo víctimas de la delincuencia.
En las últimas semanas, varios estudiantes han sido asaltados en las inmediaciones de sus instituciones educativas. Testimonios de los afectados revelan que delincuentes, muchas veces en motocicletas, los interceptan para despojarlos de sus pertenencias, especialmente celulares, dinero y maletas. En algunos casos, los atracos han estado acompañados de agresiones físicas, lo que ha aumentado la sensación de inseguridad en el sector.
Los padres de familia han manifestado su temor por la vulnerabilidad en la que se encuentran sus hijos al transitar por las calles de Bosa, especialmente en horarios de entrada y salida de los colegios. Algunos han optado por acompañar personalmente a los menores, mientras que otros han solicitado la presencia permanente de patrullas policiales en los puntos más críticos.
En respuesta a estas denuncias, la Policía Metropolitana de Bogotá, en coordinación con la Alcaldía Local de Bosa, ha implementado un plan de vigilancia que contempla patrullajes constantes, presencia de uniformados en puntos estratégicos y operativos de control para identificar a posibles delincuentes. Además, se está trabajando en campañas de sensibilización para que la comunidad denuncie cualquier hecho sospechoso y colabore con las autoridades en la identificación de los responsables de estos delitos.
El subcomandante de la estación de Policía de Bosa, Pablo Perdomo, se pronunció sobre la situación y aseguró que se están redoblando esfuerzos para garantizar la seguridad de los estudiantes. “Hemos dispuesto un grupo especial de vigilancia en los entornos escolares para prevenir cualquier acto delictivo. Invitamos a la comunidad a confiar en la Policía y a reportar cualquier irregularidad para actuar de manera inmediata”, afirmó el oficial.
Las autoridades han instado a los ciudadanos a utilizar las líneas de emergencia y las herramientas tecnológicas disponibles para reportar cualquier incidente delictivo. Asimismo, se está evaluando la posibilidad de instalar cámaras de seguridad en los alrededores de las instituciones educativas para fortalecer la prevención y facilitar la identificación de los delincuentes.
A pesar de estas medidas, los habitantes de Bosa insisten en que se requiere una estrategia de seguridad más estructural y a largo plazo, que incluya el aumento del pie de fuerza, mejor iluminación en las vías y la recuperación del espacio público. La comunidad educativa espera que las acciones anunciadas por las autoridades tengan un impacto positivo y permitan devolver la tranquilidad a los estudiantes y sus familias, quienes solo desean transitar por su localidad sin miedo.

