En un acto simbólico cargado de reconocimiento, compromiso y esperanza, la Secretaría de Mujeres, Orientaciones Sexuales e Identidades de Género del municipio de Pasto, en articulación con el Ministerio de Igualdad y Equidad, PNUD Colombia y autoridades departamentales, hizo entrega oficial de los certificados a quienes culminaron exitosamente su formación en la Escuela de Fortalecimiento Político ‘Redes del Cuidado’.
Esta escuela, creada con el propósito de visibilizar y dignificar el trabajo de cuidado, ha capacitado a mujeres y personas cuidadoras de Pasto y otras zonas del departamento de Nariño, reconociendo sus saberes, fortaleciendo sus liderazgos y ubicándoles en el centro del debate público sobre equidad, corresponsabilidad y justicia social.
Derecho
“Celebramos la graduación de mujeres cuidadoras que están siendo certificadas a través de la Escuela Redes del Cuidado. Reconocemos sus saberes, fortalecemos sus liderazgos y avanzamos en dignificar el cuidado como un derecho fundamental”, expresaron representantes del Ministerio de Igualdad, resaltando el alcance de esta política.
El evento contó con la presencia del alcalde de Pasto, Nicolás Toro, y la secretaria de Mujeres, Orientaciones Sexuales e Identidades de Género, Jaqueline Castillo, quienes reafirmaron su compromiso con la inclusión y la implementación de políticas que valoren el rol de quienes dedican su vida al cuidado de otras personas.
La formación, desarrollada en el marco del CONPES del Cuidado, hace parte de una política pública nacional orientada a garantizar condiciones de dignidad y reconocimiento a quienes tradicionalmente han asumido tareas de cuidado, especialmente mujeres, en contextos de exclusión social y precariedad económica.
Apuesta
Desde el Viceministerio para las Poblaciones y Territorios Excluidos y la Superación de la Pobreza, con el apoyo técnico de la Dirección de Cuidado, se han venido fortaleciendo 14 organizaciones de cuidado comunitario en el departamento, como parte de una apuesta por territorializar el cuidado desde un enfoque diferencial, popular y comunitario.
Las personas cuidadoras que participaron de esta experiencia ahora cuentan con herramientas políticas, organizativas y sociales que les permitirán liderar procesos en sus comunidades y participar de manera activa en la construcción de una sociedad más justa, equitativa e incluyente.