POR: Claudia Zambrano Erazo.
Las noticias como la muerte de Brian Leonardo Marín Flórez, no solo afectan a su familia y amigos sino a toda la comunidad nariñense, porque independientemente de su edad y que estaba iniciando su carrera para cumplir sus sueños, lo realmente alarmante del caso es cómo se desencadeno su fallecimiento.
Soy clara en afirmar que no somos nadie para culpar al otro, es más personalmente leer los mensajes que circulan en redes sociales solo muestran la doble moral y el odio que existe en la humanidad, ¡Ojo! con esto no quiero decir que justifico los hechos, jamás bajo ninguna circunstancia una muerte puede ser justificada. Lo claro, en este caso es que me imagino que las miles de personas que escriben a través de redes sociales ¡jamás! Se han tomado un trago, o nunca han salido con amigos y se les han pasado las copas.
La muerte de este joven me causa gran dolor, no lo conocía, no era su amiga, pero soy madre, hija, compañera y amiga y por esta razón entiendo la tristeza que deben estar sintiendo sus seres queridos y de corazón las voces de condolencias y fuerza creo que nacen de todos lo nariñenses.
Lo que sí quiero dejar claro en estas líneas es que independientemente del dolor que esto genera, lo que debe generarnos es un cambio de conciencia, es el abrirnos los ojos de cómo estamos viviendo nuestras vidas y mucho más los jóvenes. Los fines de semana en la parte céntrica de la ciudad es insoportable el desorden, es más en el parque de Rumipamba las rumbas se hacen en la calle y a ‘punta’ de hervidos y cigarrillos docenas de muchachos bailan, toman, fuman y se divierten hasta que algunos, por ejemplo, terminan dormidos de las borracheras, situación que no está mal, pero perder la conciencia por tomar sí.
El llamado urgente con esta situación, que no es la primera que se presenta en Nariño, además evidentemente de exigir Justicia, es para que las personas sean conscientes que a la hora de conducir se debe tener los 5 sentidos en el volante y ser amigos de la prudencia. No podemos permitir que más hechos como estos sigan arruinando vidas, porque no solo es la de un chico que lastimosamente se fue, también la del presunto responsable y su acompañante, los cuales según las investigaciones deberán pagar con todo el peso de la ley por su culpa.
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No podemos permitir que más irresponsables al volante ocasionen este tipo de tragedias, es más, debemos exigir a las autoridades que lleven a cabo los respectivos controles en la salida de los establecimientos nocturnos y parqueaderos, para sancionar a los conductores que pretendan conducir en estado de embriaguez, no se puede seguir esperando conocer estas noticias para tomar decisiones, sino actuar antes, para lograr prevenirlas.
Ahora que esta noticia es tendencia y que todos somos dioses para juzgar, pues tomemos conciencia que está en nuestras manos el controlar y prevenir desgracias y también que independientemente de la clase social del presunto culpable la Justicia tiene que actuar con todo el peso de la ley y no dejar este caso como una víctima más de una irresponsabilidad.