Keyla Monsalve, patrullera.

Por medio de espacios culturales niños de Tumaco construyan paz

La Casa de la Memoria extendió una cálida bienvenida a 15 niños, niñas y adolescentes que forman parte del programa cívico de la Policía Nacional en Tumaco. En compañía de la patrullera, Keyla Monsalve, se llevó a cabo este emotivo recibimiento, marcando el inicio de una iniciativa que tiene como objetivo principal la transformación de situaciones adversas y dolorosas en fuentes de esperanza y reconciliación.

Este significativo encuentro se enmarca en las actividades desarrolladas en el Distrito Especial, buscando no solo explorar el rico acervo cultural del Pacífico nariñense, sino también solidarizarse con las víctimas que el conflicto armado ha dejado a su paso. Comprometidos con ser agentes de cambio, estos niños se han comprometido a contribuir al bienestar del territorio mediante sus acciones positivas, promoviendo el respeto y fomentando la sana convivencia.

Formación

En el transcurso de la visita, los menores reconocieron la importancia fundamental que desempeña la cultura en la formación de la conciencia cívica. La cultura, como patrimonio ancestral, abarca creencias, valores, normas y prácticas compartidas por la sociedad, sirviendo como base para generar conciencia y participación ciudadana en la construcción de la paz.

Cabe destacar que la cultura ejerce una influencia positiva al transformar las realidades sociales a través de relatos, cuentos, cantos y mitos que narran historias de resistencia y esperanza. Este enfoque no omite los derechos, deberes y compromisos asumidos en aras del bienestar común de la región.

Desde la Casa de la Memoria, se extendió la invitación a la comunidad a visitar el museo y sumarse de manera articulada a estos procesos. El llamado es a trabajar juntos por la paz y la vida en Tumaco, construyendo puentes que fortalezcan los lazos comunitarios y fomenten un futuro lleno de esperanza y reconciliación.