Sigue siendo motivo de grandes críticas, el hecho de que el Presidente de la República, Gustavo Petro, se haya hecho lo que sabemos, en lo que tiene que ver el nombramiento en su gabinete de ministros, de personas provenientes de nuestro departamento de Nariño. En ese aspecto, la expectativa fue grande, dado que esta zona, fue una de las regiones del país, que mayor número de votos le dio a Petro, tanto en la primera vuelta del 29 de mayo, como en la segunda del 19 de junio.
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Entonces, ¿qué sucedió? Pues lo que le cuentan al pájaro picón picón es que en efecto, el nuevo presidente tenía varias hojas de vida de dirigentes nariñenses, para incorporar al menos a uno, a su gabinete presidencial. Pero el joven Gustavo se hartó de la pelotera y actitud de quienes llegaron hasta Bogotá, a despotricar y hablar pestes de sus coterráneos, por lo que mejor no nombró a ningún nariñense, a excepción del exgobernador Camilo Romero a quien mandó como embajador a Argentina. Así dizque fue la cosa.