En la política colombiana continúan las tensiones dentro del espectro de la derecha con un nuevo capítulo entre el representante a la Cámara Miguel Polo Polo y la senadora María Fernanda Cabal, tras el anuncio de Polo Polo de apoyar al precandidato presidencial Abelardo de la Espriella.
La controversia se desató luego de que Cabal, figura prominente del uribismo y exaspirante a la candidatura presidencial, expresara públicamente su decepción por el giro político de Polo Polo. En una entrevista con la revista Semana, la senadora afirmó que la decisión de Polo Polo de respaldar la campaña de De la Espriella la afectó tanto en lo personal como en lo político, al punto de decir, en tono coloquial, que él “le puso los cachos”. Según Cabal, esta acción representó, para ella, un acto de deslealtad hacia su relación política y de amistad, especialmente porque asegura que fue una pieza clave en la consolidación del liderazgo de Polo Polo y su elección al Congreso.
Cabal sostuvo que movilizó equipos propios y externos para apoyar la campaña de Polo Polo en 2022, esfuerzo que, según ella, fue decisivo para que alcanzara su curul en la Cámara de Representantes. “Me dolió más la deslealtad”, insistió, y subrayó que su expresión, aunque coloquial, reflejaba un sentimiento profundo de traición por parte de quien había sido un aliado cercano en el pasado. También aprovechó para reflexionar sobre las dinámicas internas del Centro Democrático y la escasez de lealtades en la política actual.
Por su parte, Miguel Polo Polo reaccionó a estas declaraciones desde su cuenta en la red social X, donde rechazó hacer una confrontación pública con Cabal. En su mensaje, el representante afirmó que no entrará en polémicas internas dentro de la derecha y advirtió que “esto no es un tema de sentimientos; es un tema de PATRIA”, en referencia a su respaldo a Abelardo de la Espriella como parte de una construcción política más amplia para enfrentar al gobierno actual y buscar la presidencia unida. Además, aseguró que no caerá en lo que llamó “una trampa de la izquierda” al permitir que estas diferencias internas se conviertan en un espectáculo político.
Parte del trasfondo de esta disputa surge de las tensiones internas entre diferentes sectores de la derecha colombiana, donde figuras como Cabal, Polo Polo y otros líderes han tenido que posicionarse ante la creciente popularidad de Abelardo de la Espriella en la carrera presidencial. De la Espriella, abogado y candidato con fuerte presencia mediática, ha consolidado apoyo de algunos sectores conservadores que buscan una alternativa unificada frente a la izquierda.
En declaraciones posteriores, Polo Polo incluso ha señalado a personas cercanas a Cabal dentro de su entorno político como parte de un entramado que, a su juicio, intentaba perjudicarlo, aunque evitó calificar directamente a Cabal como traidora, prefiriendo dejar la interpretación de esos eventos a la opinión pública.
El episodio expone, en todo caso, la fragilidad de las lealtades en la política contemporánea colombiana, donde alianzas y respaldos pueden cambiar con rapidez según el contexto electoral y las aspiraciones individuales, algo que tanto Cabal como Polo Polo han puesto de manifiesto en sus recientes declaraciones públicas.

