La líder opositora venezolana María Corina Machado reapareció públicamente en Oslo (Noruega) tras permanecer meses en la clandestinidad por razones de seguridad, generando numerosas reacciones de figuras políticas en Colombia.
Machado, ganadora del Premio Nobel de la Paz 2025, se mostró emocionada desde el balcón de un hotel frente a simpatizantes que la recibieron entre gritos de “libertad”. Aunque no pudo asistir en persona a la ceremonia del Nobel, su presencia en la capital noruega fue vista como un acto simbólico que renovó su liderazgo en la lucha por la democracia en Venezuela.
Reacciones de políticos colombianos
Enrique Gómez, excandidato presidencial, publicó que la aparición de Machado en Oslo “emociona” y que la situación de Venezuela debería servir de advertencia para Colombia, subrayando que “no podemos perder Colombia, salvaremos a nuestro país”.
La senadora María Fernanda Cabal, del Centro Democrático, celebró la fortaleza de la líder venezolana con un “¡Qué viva la libertad!” y expresó confianza en que “pronto Venezuela será un país democrático”.
El abogado y precandidato Abelardo de la Espriella resaltó el simbolismo de la imagen de Machado en el escenario internacional y afirmó que representa “el principio del fin de la narcodictadura chavista”.
En redes sociales, varios ciudadanos sumaron mensajes de apoyo con banderas venezolanas y expresiones de respaldo a la líder opositora.
Significado político del momento
La reaparición de Machado ha sido vista por muchos políticos colombianos como un llamado de atención sobre los desafíos que enfrentan las democracias en la región y la importancia de proteger los valores democráticos. Algunos aprovecharon la ocasión para enfatizar mensajes de esperanza y para criticar regímenes autoritarios.
Este episodio no solo ha resonado en el contexto venezolano, sino que también ha generado comentarios en el debate político colombiano, especialmente en la lucha por la defensa de la democracia y los derechos civiles en América Latina.

