Hallazgo tardío en el centro de Bogotá
El presidente Gustavo Petro denunció este jueves que se está gestando un plan para asesinarlo, tras conocerse el hallazgo de dos lanzagranadas en el centro de Bogotá. Las armas fueron incautadas en febrero, pero —según Petro— solo hasta ahora se informó públicamente del hecho.
“Que miembros de la Policía hayan ocultado el encuentro de estas armas antitanque, capaces de romper el blindaje de cualquier carro, es quizás más grave que el hecho”, afirmó el mandatario, dejando entrever una posible omisión deliberada por parte de uniformados.
“Mi protección es del pueblo”: Petro
El presidente aseguró que se hará una investigación a fondo y afirmó que no se trata de un hecho aislado: “Varias reuniones se realizan para coordinar atentados. En la extrema derecha mafiosa la orden está dada. Mi protección es del pueblo”.
Petro también reveló que, en el pasado, ya se habían recibido alertas de atentado en su contra. Según él, “la primera información de un atentado la suministró la Embajada de los EE. UU. para el 20 de julio del año pasado (2024)”.
Respuesta de la Policía: las armas no eran funcionales
Pese a la gravedad de las acusaciones presidenciales, la Policía Metropolitana de Bogotá emitió un comunicado en el que minimiza el riesgo representado por los artefactos. Tras la inspección técnica del personal antiexplosivos, se concluyó que los lanzagranadas eran de un solo uso, no contaban con munición y ya no eran funcionales.
Además, gracias a la revisión de cámaras de seguridad del sector, las autoridades lograron identificar a las personas que habrían abandonado los elementos en la vía pública.

