Editorial Diario del Sur

OPORTUNIDAD PARA LAS MUJERES Y LA JUVENTUD

Nos aprestamos a la realización en 9 meses, de los comicios territoriales, donde elegiremos a nuestros próximos gobernadores, alcaldes, diputados, concejales e integrantes de las juntas administradoras locales, JAL.

Es así, como en nuestro Departamento de Nariño, ya ha surgido un buen número de precandidatos a las diferentes corporaciones, lo cual no nos extraña, puesto que bien sabemos que, en esta zona sur del país, se vive con especial fervor, los procesos electorales.

Sin embargo, hemos visto en esas preaspiraciones iniciales, que no hay mucha presencia de la juventud, así como de las mujeres, como lo manifiestan los mismos dirigentes políticos, quienes afirman con preocupación que ha sido una constante en las últimas elecciones, la dificultad que se tiene para la conformación de las diferentes listas, por la falta de mujeres.

En ese sentido, mucha agua ha pasado bajo los puentes desde que el 25 de agosto de 1954, la Asamblea Nacional Constituyente durante el Gobierno del Presidente, Gustavo Rojas Pinilla, aprobó el derecho al voto de la mujer, lo que se consideró como un triunfo para el sexo femenino, el cual se cristalizó el primero de diciembre de 1957, cuando un millón 835 mil 255 mujeres acudieron por primera vez a las urnas.

«Nos parece que una gran puerta para el ingreso a las actividades políticas, es precisamente el proceso de las JAL, puesto que los hechos nos demuestran que esta elección ha sido el punto de partida y trampolín de numerosos dirigentes políticos, quienes luego de dar ese primer paso, llegaron a los concejos, las asambleas e inclusive al Congreso de la República».

Nos parece que de cara a las elecciones territoriales que tendremos en el presente año, se hace necesario que tanto los partidos y movimientos políticos, se comprometan de manera total en lo que tiene que ver con el reconocimiento y promoción al liderazgo de las mujeres para lograr el incremento de las mujeres candidatas e igualmente erradicar la violencia contra las mujeres en la política, un flagelo que lamentablemente ha tomado mucha fuerza en el país y aparece como una de las principales causas para que muchas de ellas se abstengan de intervenir en los procesos políticos, ante el temor de convertirse en víctimas de algún episodio desagradable.

También es conveniente promover la participación de la juventud en los procesos políticos, puesto que, en ese sentido, al menos en nuestro departamento de Nariño, se cuenta con excelentes, líderes, quienes, sin embargo, no se atreven a dar el salto hacia las corporaciones políticas.

En ese sentido, consideramos que las elecciones que nos aprestamos a celebrar el 29 de octubre, se constituyen en una excelente oportunidad para que los jóvenes, tanto hombres, como mujeres, se atrevan a aspirar. Esto puede ser como candidatos a las juntas administradoras locales JAL e inclusive a los concejos, puesto que como todo lo sabemos, Colombia es una de las más fuertes democracias de América Latina y quien así lo desee, puede aspirar a algún cargo de elección popular.

A nosotros nos parece que una gran puerta para el ingreso a las actividades políticas, es precisamente el proceso de las JAL, puesto que los hechos nos demuestran que esta elección ha sido el punto de partida y trampolín de numerosos dirigentes políticos, quienes luego de dar ese primer paso, llegaron a los concejos, las asambleas e inclusive al Congreso de la República, ejemplos que tenemos varios en nuestro Departamento de Nariño.

Reiteramos entonces, nuestro llamado a las mujeres y a la juventud, para que aprovechen este año electoral y se decidan a participar en las elecciones del próximo 29 de octubre, en las que podrán ser aspirantes a cualquiera de las corporaciones. Nuestra política necesita con urgencia de refrescarse y para ello se requiere de caras nuevas y de la presencia de las mujeres. Solo hay que atreverse.