Chile tiene nuevo presidente y Latinoamérica cuenta con un gobierno digno acatado por los chilenos. Gabriel Boric ex líder estudiantil, 35 años, tendrá entre muchos retos encausar la crisis social que provocó las jornadas del 2019 donde como consecuencia positiva fue una nueva constitución que será otro reto del nuevo gobierno para implementarla, trabajo inmensamente difícil porque traerá seguramente controversia entre los polos extremos en que se encuentra dividida la sociedad chilena.
Las consecuencias económicas que dejó la pandemia será otro frente, básico para las reformas que vendrán con la nueva orientación del gobierno.
El candidato de la extrema derecha llamó y felicitó al presidente electo. Mencionamos esto porque denota la madurez del pueblo chileno. Muy seguramente Boric es mucho más radical (tuvo como aliado al partido comunista de Chile), que el candidato de izquierda colombiano, sin que allá se invocara los fantasmas y embelecos de que hablamos la semana pasada invocados por la derecha colombiana en el poder. Nos habíamos referido a los cuentos de brujas y aparecidos como el “castro chavismo”, el coco del comunismo, los “demonios” de los hermanos venezolanos o Cuba socialista. Nada de esto se invocó en Chile y ahora tiene ese país presidente para todos los chilenos.
Qué buen ejemplo para Colombia. Pero creo que el pueblo de nuestro país ya está suficientemente maduro como para caer en las mentiras anteriormente citadas y que dieron sus frutos para elegir hace 4 años al régimen actual. Solo basta leer la excelente investigación periodística de Daniel Coronell titulada “Uribe acorralado” para darse cuenta del personaje que inventó aquellos embelecos grotescos para intimidar a la gente, gente de buena fe que creyó en fantasmas para espantar niños traviesos como antaño y resultó elegido con aquellos engaños el desastroso gobierno que termina en agosto del 2022. Vuelve la esperanza, se avizora el cambio.
Por: CARLOS ALVAREZ