Por: Sofonías Rodríguez M.
Con hechos relevantes, de historia y protocolo, cada 6 de agosto en la capital nariñense con diferentes eventos se conmemora la creación del Departamento de Nariño que es lo justo como espacio para recordar gobernantes y personalidades que han hecho protagonismo en la cultura, el arte, la literatura, en la música y los deportes desde esta sección del país.-
Pero hay que decir que desde 1.904, el sur ya por ubicación geográfica, por indiferencia y quizá por algo de discriminación no hemos contado con la suerte necesaria para que los gobiernos le presten la atención debida en el camino al desarrollo: Si es aquí donde comienza Colombia, debía ser hace rato un lugar estratégico para poner en marcha proyectos y obras le den vida al comercio y mantenga activas las relaciones con países vecinos.
De este sueño nunca despertamos los nariñenses. Pasa el tiempo y los reclamos hacia el gobierno nacional siguen en diferentes tonos, pero en el mismo sentido sin respuestas concretas. Valga señalar que si todavía conservamos algo en nuestra memoria siempre hemos sido ajenos a la voluntad política de quienes ostentan poder. El viejo dicho popular de que”Soy pobre y vivo lejos” como que le pega literal a la región sureña.
Ser dueños de maravillosos atractivos en todo el recorrido de la geografía nariñense es un privilegio que otros lugares no lo tienen. Aún con ese valor agregado no ha sido posible conseguir el justo apoyo de parte del estado y en ocasiones apenas conformarse con lo que desde las entidades se intenta proyectar.-Tanta ha sido la subestimación a este lugar que varias obras inconclusas de Nariño, han figurado como terminadas.- Qué horror! Lo de la doble calzada Popayán- Pasto, es sólo un sofisma.-
La culpa para que todo esto pase es recurrente porque nuestros voceros siempre se interesan primero por conseguir los suficientes votos para ocupar sus curules hasta cuando sus electores les permitan,pero que se diga han trabajado por el bienestar de las comunidades, la verdad no se ha visto, ni se verá. La gente hoy más nunca es oportunista y como pueblo como cómplice a eso los ha acostumbrado-.
Por eso hoy en medio de todos deseos y gestiones de nuestros gobernantes seccionales por contribuir con el desarrollo, con alguna razón me atrevo a decir:” Nariño lleva 120 años tocando puertas.” sin que nadie le responda y le de un trato equitativo junto a otros departamentos