El Comité de Manejo de Desastres de Nariño presentó un balance detallado sobre la actual temporada de menos lluvias que atraviesa el departamento, poniendo especial atención a las condiciones climáticas y sus efectos en el territorio.
Según el reporte, entre los meses de julio y agosto se registraron 45 incendios forestales en 17 municipios, en su mayoría ocasionados por acción humana. Estos eventos afectaron a 186 familias, más de 500 personas y 194 hectáreas de bosques, pastizales y cultivos. Los municipios con mayores impactos fueron El Tambo, Pasto y Chachagüí, zonas que se han visto particularmente vulnerables en esta época de sequía.
Sensibilizar
“Actualmente atendemos cinco incendios en el departamento. Uno permanece activo en Pasto; otro fue controlado en Funes, y se registran emergencias de gran magnitud en El Tambo y Los Andes Sotomayor, con cerca de 15 hectáreas afectadas. También en San Lorenzo se reportó afectación a pastizales y cultivos”, explicó Jorge Luis Montes, delegado departamental de Bomberos.
Por su parte, Jorge Tovar, profesional de la Dirección Administrativa de Gestión de Riesgo de Desastres, advirtió que septiembre es un mes crítico en la ocurrencia de estos eventos. “La estrategia se centra en sensibilizar a la comunidad y en fortalecer la articulación entre organismos de socorro, de modo que podamos responder de manera oportuna y reducir el impacto de las emergencias”, puntualizó.
Enfrentar
El Comité también anunció la realización de simulacros como parte de la preparación preventiva. El próximo 9 de septiembre se desarrollará un simulacro vial en la doble calzada Pasto–Ipiales, mientras que el 22 de octubre se llevará a cabo el Simulacro Nacional de Respuesta a Emergencias, el cual incluirá escenarios de sismo y tsunami en la región.
De acuerdo con el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (IDEAM), la transición hacia la segunda temporada de lluvias se dará entre finales de septiembre e inicios de octubre. Esto obliga a anticipar medidas preventivas que permitan enfrentar no solo incendios forestales, sino también posibles deslizamientos e inundaciones. “Estos espacios son importantes para preparar a los municipios ante escenarios adversos”, destacó Luis Armando Mejía, coordinador del Área Operativa Número 7 del IDEAM.
Proteger
La reunión del Comité de Manejo de Desastres, convocada por la Dirección Administrativa de Gestión de Riesgo de Desastres, contó con la participación de instituciones clave como el Instituto Departamental de Salud de Nariño (IDSN), la delegación departamental de Bomberos, la Defensa Civil, el Cuerpo de Bomberos Voluntarios de Pasto, la Cruz Roja Colombiana seccional Nariño, la Secretaría de Educación e Infraestructura del departamento, Invías, la Policía de Nariño y el Batallón de Ingenieros, entre otros.
Con el compromiso de los 64 Consejos Municipales de Gestión de Riesgo de Desastres y el respaldo de organismos de socorro, autoridades civiles, ambientales y militares, el departamento de Nariño reafirma su capacidad para responder de manera coordinada. El objetivo central es claro: proteger la vida, salvaguardar el territorio y construir comunidades más resilientes frente al cambio climático y los desastres naturales.