No cesa de llover en Pasto y en la mayoría de los municipios de nuestro departamento, lo que nos indica que los pronósticos del Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales, Ideam no se han equivocado y estaremos abocados hasta el final de este año, a una temporada de lluvias que ya en nuestro medio ha provocado la muerte de tres personas, así como 7 grandes inundaciones, 14 deslizamientos y numerosos damnificados.
Lo que estamos viendo nos indica que debemos tener la máxima prevención con esta temporada invernal, que por igual azota con fuerza a gran parte de nuestro país, donde ya se presentan toda clase de emergencias.
Por ello, consideramos que, en nuestro departamento de Nariño, la alerta debe ser máxima, puesto que día tras día, vemos como las lluvias caen con intensidad en vastas zonas de nuestra geografía. Nos estamos refiriendo a una situación de extrema peligrosidad, puesto que, a los sucesos ya registrados en esta zona sur del país, sabemos que, en muchos municipios, en especial los situados en nuestra costa pacífica, se localizan, no uno ni dos, sino varios asentamientos subnormales, con viviendas construidas en zonas de alto riesgo, que ahora la continuidad de las lluvias hace mucho más peligrosas.
¿Qué representa esto? Qué miles de personas se encuentran en estos momentos en grave peligro de muerte, puesto que esos asentamientos humanos se encuentran asentados en el camino de posibles deslizamientos y derrumbes, lo que puede dar lugar a la ocurrencia de hechos trágicos.
«No cesa de llover en Pasto y en la mayoría de los municipios de nuestro departamento, lo que nos indica que los pronósticos del Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales, Ideam no se han equivocado y estaremos abocados hasta el final de este año, a una temporada de lluvias que ya en nuestro medio ha provocado la muerte de tres personas».
Por lo tanto, nos parece acertado el clamor que viene haciendo el gobernador de Nariño, Jhon Rojas Cabrera, al director nacional de la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres, para que le coloque el acento a la situación de emergencia por la que afronta nuestra región, donde la calamidad no solo contempla la pérdida de vidas humanas y viviendas, sino que también tiene incomunicados a varios municipios, debido a graves daños en vías y puentes.
Entonces, tenemos que el invierno y su temporada de lluvias nos tiene enfrentados a una emergencia cuya magnitud hace rato que sobrepasó las capacidades de reacción de los municipios, por lo que se requiere con urgencia de una ayuda especial, para atender unas circunstancias que se presentan bastante díficiles.
En efecto, el panorama no es muy alentador puesto que en primera instancia se tienen los pronósticos del Ideam, en los que se advierte, en lo que tiene que ver con Nariño, que a medida que se acerque el mes de noviembre, vamos a tener torrenciales lluvias. A esto, se une que en estos instantes, 31 municipios, casi el 50 por ciento del departamento, se encuentran amenazados por deslizamientos de tierra e inundaciones, por lo que, como lo expresa el gobernador Rojas Cabrera, se requiere de un trabajo articulado.
Ante esto, nuestro llamado es para que, comenzando con la misma comunidad, los organismos de socorro, la cooperación a nivel nacional e internacional y los organismos que integran el sistema de asistencia y atención de desastres, se conforme un frente común para hacerle frente al invierno y enfrentar de la mejor manera posible, sus estragos.
Consideramos que ante el peligro mortal que amenaza a centenares de personas en el departamento de Nariño, lo primero que se debe hacer evacuar a la población que vive en zonas de alta pendiente y también quienes han construido sus casas, bajo esas pendientes o en terrenos inestables. Se trata de hombres, mujeres y niños, que en el momento menos pensado podrían perder sus vidas y en este orden de ideas, igual desalojo por parte de las autoridades, se debe hacer para quienes tienen sus viviendas a las orillas de los ríos.
Es difícil que la gente abandone sus viviendas, pero como están las cosas, esto podría salvar cantidades de vidas, puesto que la emergencia es grande.