MÁGICO

Por: Chucho Martínez

Ahora que los carnavales de Pasto de verdad han adquirido la connotación de Patrimonio inmaterial “de la humanidad” amerita un análisis holístico, es decir, integral, global y sistémico, de cada realidad como un todo, distinto de la suma de las partes que lo componen. Solo así se puede entender su funcionamiento. Pues son muchos los elementos que se conjugan en la construcción de una manifestación local del realismo mágico como el carnaval que muestra lo extraño, irreal u onírico ( alucinador) como algo cotidiano. Hace rato que se viene representando en Nariño, en sus carnavales, en otras expresiones culturales y hasta en la política, lo fantástico, lo irreal y lo extraño de la manera más común y cotidiana posible que a ratos se parece a la fantasía.

Es como una sensibilidad estética y  “adivinación poética o una negación poética de la realidad”que escribieron Uslar Petri, Carpentier o Asturias, sobre la realidad indígena, negra y mestiza de América Latina, fuente de inspiración de los carnavales de Pasto que  no son de blancos ni de negros, sino, de mestizos, de la multiculturalidad, en donde las figuras son tomadas de la leyendas, o la imaginación de indígenas, negros y mestizos (no hay blancos ni en España porque fueron mestizados por los moros). Marcan los colores fuertes del trópico, como el rojo indio, achiote o diablo. Instrumentos musicales de viento y tambores de los indígenas y los negros sintetizados por la tecnología moderna en el uso de materias primas. El vestuario, que cada vez profundiza en los diseños indígenas. En el momento en que nos reconozcamos como mestizos podremos valorar nuestra perspectiva histórica como recomendaba Otto Morales Benítez en su libro “Memorias del mestizaje”.

De otro lado, es inevitable y urgente una lectura estructural de la economía del carnaval para dimensionar cuánto se queda en Nariño, cuál es la tasa de retorno para Nariño, la gobernación y las alcaldías. Y en qué medida podemos crear una economía propia, nariñense o en su defecto de economía mixta, protegidas, que respondan a la creciente demanda de visitantes. Colapsaron todos los servicios turísticos y no podemos quedarnos sentados en el umbral de la puerta mirando pasar las carrozas del próximo carnaval de Pasto, que es de todos, propios y extraños. Es de la humanidad.