Por: Claudia Zambrano Erazo
Mi corazón se llena de alegría cuando conozco sobre proyectos que permiten ayudar y trabajar por el resto de la comunidad, es una manera de sentir admiración por saber que pese al caos en el que vivimos diariamente hay gente que aporta de alguna manera para que este mundo sea mejor.
Por casualidades de la vida en mi camino conocí la estrategia del Banco de Leche Humana de Nariño y créanme que estoy feliz, agradecida y con el corazón lleno de satisfacción de saber de este proyecto. Mi admiración hacia la médico pediatra, la doctora María Fanny Martínez y su grupo de trabajo, porque gracias a ellos diariamente se salvan docenas de niños.
Mi labor con estas letras es dejar eco de esto que existe y que necesita el respaldo de todos para poder salir adelante, porque el tema de la desnutrición es una realidad que afronta nuestro departamento de Nariño y la única manera de combatirlo es garantizando la leche materna, es poder generar conciencia de la importancia de alimentar a nuestros bebés y como muchas mujeres además de ser madres son capaces de salvar la vida de otras personitas que lo merecen.
Mi llamado hoy, es para que las mamitas se unan y apoyen esta bonita labor, no sé necesita mucho y la verdad pueden hacer un mundo mejor. Para ser donante de leche solo se necesita corazón y ganas y creo que en el fondo, todos somos capaces de poder ser parte de estos actos positivos y relevantes.
Hoy y gracias al trabajo de este grupo multidisciplinario, el banco de leche humana pasteuriza aproximadamente de 3.000 a 4.000 centímetros de leche donada semanalmente, lo cual permite alimentar a 10 o 12 bebés que están hospitalizados durante este periodo. Lo anterior debido a que un niño prematuro, en sus primeros días requiere un volumen pequeño de acuerdo a su capacidad gástrica y poco a poco se aumenta esta cantidad o hasta que su madre ya lo pueda amamantar.
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En el 2023 el banco ha recibido la donación de leche de 63 madres y esto ha garantizado la alimentación de 124 bebés. Imagínense lo que pasaría si fueran muchas más mamitas las que se unen a estas estrategias.
El proyecto existe y aquí en Nariño tenemos uno de los 15 que hay en Colombia y solo necesitamos abrirle diferentes espacios para que la gente lo conozca y se una para salvar las vidas de los bebés.