El exministro del Interior Luis Fernando Velasco fue objeto de una medida de aseguramiento intramural ordenada por la magistrada Aura Alexandra Rosero, del Tribunal Superior de Bogotá, en el marco de la investigación por presuntos hechos de corrupción relacionados con la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (Ungrd).
Tras conocerse la decisión judicial, Velasco presentó un recurso de reposición durante la audiencia, en el que expuso sus argumentos en contra de la medida. En una intervención que comenzó de forma serena, el exfuncionario insistió en que no tiene responsabilidad alguna en los delitos que se le atribuyen dentro del entramado de corrupción que habría involucrado a funcionarios, contratistas y congresistas.
Según la Fiscalía General de la Nación, Velasco habría actuado como líder y articulador de las conductas ilícitas, entre ellas el direccionamiento de contratos y la desviación de cuantiosos recursos públicos mediante sobrecostos, fondos que estaban destinados a atender emergencias y beneficiar a poblaciones vulnerables.
Durante su intervención, el exministro cuestionó los fundamentos utilizados por la magistrada para imponer la medida de aseguramiento y negó de manera enfática cualquier intención de evadir a la justicia. Aseguró que siempre ha estado dispuesto a comparecer ante las autoridades y que continuará ejerciendo su derecho a la defensa mediante los mecanismos que contempla la ley.
“Mi lugar es aquí, dando la cara a los colombianos, afirmando que soy inocente y defendiéndome con pruebas para convencer, si no es a usted, a otros jueces, de que no he cometido ningún delito”, expresó Velasco al cierre de su intervención, visiblemente alterado.
Asimismo, rechazó que se le considere un peligro para la sociedad, señalando que ha atendido todas las citaciones judiciales y que, pese a que las investigaciones en su contra se han extendido por más de 18 meses, no existe un solo hecho concreto que demuestre que haya intentado interferir en el proceso.
Velasco también afirmó que se encuentra alejado de la vida pública, dedicado a su familia y al cuidado de su padre, quien atraviesa problemas de salud. Indicó, además, que desde hace aproximadamente un año no ha visitado ninguna entidad estatal. “No represento ningún riesgo”, sostuvo ante la magistrada.
El exministro reiteró que enfrentará el proceso judicial con pruebas y que demostrará su falta de responsabilidad en los hechos de corrupción por los cuales ya hay personas condenadas y otras privadas de la libertad.
Por su parte, la defensa solicitó la revocatoria de la medida de aseguramiento y pidió que, en su lugar, se le conceda la detención domiciliaria. De manera subsidiaria, solicitó que Velasco sea recluido en una guarnición militar, argumentando que su condición de exfuncionario del alto Gobierno lo expone a riesgos especiales dentro del sistema penitenciario.

