Liverpool dio un paso decisivo hacia el título de la Premier League tras vencer 1-0 al Leicester en la jornada 33, con un gol de Trent Alexander-Arnold que desató la euforia entre los hinchas visitantes en el King Power Stadium.
Pese a que el Arsenal había goleado a Ipswich horas antes, reduciendo las probabilidades de que los ‘Reds’ se consagraran fuera de casa, el equipo de Arne Slot sabía que debía sumar de a tres para mantener el control en la recta final del campeonato.
Durante el primer tiempo, Liverpool dominó el juego, pero se encontró con un Kasper Hermansen inspirado bajo los tres palos. El arquero danés sostuvo el empate con varias atajadas clave, impidiendo que los visitantes tomaran ventaja.
La única diferencia llegó en el minuto 75, cuando Alexander-Arnold —quien volvió a las canchas tras una lesión sufrida en Champions y en medio de rumores sobre su futuro contractual— ingresó desde el banco para marcar el tanto del triunfo. El lateral inglés aprovechó un rebote tras dos disparos que pegaron en los palos y conectó una volea precisa dentro del área para romper la igualdad.
El festejo fue efusivo: se quitó la camiseta y corrió directo hacia la tribuna visitante para celebrar junto a los hinchas del Liverpool, en una muestra de desahogo y conexión con la afición.
Tras el gol, los de Arne Slot supieron manejar el resultado y controlar los intentos finales del Leicester, asegurando una victoria que los deja a solo un paso de consagrarse campeones. Con 13 puntos de ventaja sobre el Arsenal y 15 por jugarse, el Liverpool podría sellar el título el próximo fin de semana en Anfield, ante el Tottenham.
El título parece inevitable, y el equipo ‘Red’ está listo para celebrar en casa lo que sería una Premier histórica bajo el mando de Slot.