Próximo a cumplir 80 años de edad, es el vendedor de lotería más antiguo de Nariño y quizá de Colombia. Comenzó a los 11 años de edad y con esta actividad educó a sus 6 hijos. Ha vendido 7 premios mayores y 20 secos.
“Tengo 2 oficinas en la Plaza de Nariño, una es la 777 y la otra la 999, nos dice con excelente humor, don Rodolfo Delgado, quien es el vendedor de lotería más antiguo de Nariño y seguramente de Colombia, puesto que está próximo a cumplir 80 años.
Por estos días anda muy contento, ante la reaparición, luego de 20 años de la Lotería de Nariño, la cual le trae gratos recuerdos, de la lejana época, en la que, cuando tenía 11 años de edad, para ayudar a su madre, luego del fallecimiento de su padre, empezó a vender lotería, periódicos y revistas.
Precisamente, logramos abordarlo en su oficina 777 de la Plaza de Nariño, para hacerle algunas preguntas, sobre los 68 años que lleva vendiendo lotería y lo que ello ha representado para su vida.
-¿A qué edad comenzó a vender lotería?
-Fue a los 11 años de edad, luego de la muerte de mi padre, Horacio Enrique Delgado, quien cuidaba las obras del Hotel de Turismo, hoy Hotel Morasurso y lo hice para ayudar a mi madre, Flor Erazo de Delgado, puesto que éramos 11 hijos. Además de la lotería, vendía, periódicos y revistas.
-¿Qué loterías vendía?
-Esa época yo vendía la Lotería del Valle, la del Cauca y la de Nariño. Ah y, también, la Lotería de Cúcuta.
-A propósito de la Lotería de Nariño, ¿qué opina de su regreso, luego de 20 años?
-El recobrar la Lotería de Nariño, que volverá a jugar desde el 15 de febrero, es una excelente iniciativa del señor Gobernador, Luis Alfonso Escobar, quien de esta manera cumplió lo que nos ofreció en campaña. La Lotería de Nariño, nos trae muchos beneficios para la salud y todos nosotros, quienes nos ganamos nuestro diario con la venta de lotería, nos sentimos muy contentos y en nombre de mis compañeros, yo les digo a todos que colaboremos con la salud de nuestro departamento.
– ¿Cuántos años, lleva vendiendo lotería?
-Ya voy a completar 68 años. Me ha ido muy bien y con este trabajo, eduque a mis hijos y espero hacerlo con los que vienen, jajaja.
-¿Cuándo usted comenzó a vender lotería, los sorteos eran diferentes a los de ahora?
-Claro que sí. Se ganaba acertando los 4 números y nada más, pero después a alguien le dio por inventarse lo de las series y eso fue muy perjudicial, puesto que nos bajó el 70 por ciento de las ventas.
.¿Cuánto valían los billetes?
Había de varios precios desde los 5 pesos. Recuerdo que la Lotería de Nariño, parecía una sábana puesto que tenía como 80 fracciones.”
-¿Dónde vendía cuando comenzó desde niño a trabajar?
-La Plaza de Nariño, era el mejor sitio, así como los bancos. Allí nos compraban bastante-
¿Cómo era el aspecto de la Plaza, en esos primeros años, cuando comenzó a vender lotería?
-Era muy diferente al de ahora. En la plaza había muchos árboles y también muchas flores y por eso tenía un aspecto muy bonito. Era un lugar muy tranquilo y ordenado. Cualquiera podía salir a disfrutar de un helado o, a hacerse lustrar.
-Transcurridos tantos años, ¿cómo ve hoy en día la Plaza de Nariño?
-Ha cambiado bastante para mal. La plaza de Nariño se volvió un refugio de todos los alcohólicos, quienes ocupan todas las bancas y muchas protagonizan escándalos. Me parece que se debe trabajar en la recuperación del parque, porque antes no se permitía la presencia de personas en estado de embriaguez o que se tomarán las bancas para dormir, lo que da un mal aspecto.
-¿Cuáles han sido sus principales clientes?
-Entre los que recuerdo, estaban el doctor Leonardo Fajardo, quien era el propietario de un molino, el señor de la Droguería de Los 3 Reyes, cuyo nombre no recuerdo en este momento y Don Alfredo Aguirre, entre otros. A algunos de ellos, les vendía algunos premiecitos. En mis primeros años, no solo vendía en la Plaza de Nariño, sino en los alrededores de la antigua plaza de mercado, que después fue destruida por un incendio. También tenía buena clientela en los jugadores de sapo.
-¿Se ha valido de algunos trucos a los que recurren sus colegas para vender, como hacer que se les cae un billete de lotería al paso de un transeúnte?
-Ah, eso se conoce como el vote. Y, no, nunca he hecho esto, puesto que los que se valen de esas cosas no son más que estafadores, ya que se trata de lotería falsificada que tratan de vender diciéndole a la gente, “vea, lo está llamando la suerte, el billete le cayó a los pies.-
-Y, ¿alguien se ha ganado premios con esos billetes falsificados?
-Tristemente sí. El “vote”, se lo hicieron a una señora, frente al Éxito del centro y ella compró el billete que era de la Lotería de Manizales y supuestamente se ganó el premio mayor. Pero cuando fue a cobrar le dijeron que el billete era falsificado y no había ganado nada, por eso mi petición es para que la gente le compré a su lotero de confianza.
-¿Cuántos loteros hay?
-En estos momentos, solo somos 97, pero antes, hace 20 años, cuando se acabó la Lotería de Nariño, habíamos como 500 afiliados al Sindicato y muchos han muerto como don Tobías Toro Torres, don Esteban, Luis H, Servio Pérez, entre otros.
-Ahora, cuando la Lotería de Nariño, vuelve desde el próximo sábado, ¿Qué recuerda de los sorteos de hace años?
-La Lotería de Nariño, jugaba en Pasto, ahora tengo entendido que los sorteos se van a hacer en Bogotá. Me acuerdo que los sorteos se hacían con bolas de pool, numeradas del 0 al 9, a partir de las 6 de la tarde-
¿Había transmisión radial?
-Claro que sí. Los encargados de anunciar los números ganadores eran don Antonio “Terry” gallego y don José Eduardo Cortés, a quien todo el mundo le decía “El Pronto”. Había mucha audiencia, puesto que además de venderse en Pasto, la Lotería de Nariño, se vendía bastante en Tumaco, Ipiales, La Unión y Sandoná y también se enviaba al Putumayo.
-¿Cuál es su horario de trabajo?
-Yo comienzo a vender mi lotería a las 8 de la mañana y termino a las 12 y media del día, hora en la que me voy a almorzar. Después por la tarde salgo a la Plaza a las 2 de la tarde y me voy a mi casa a las 6 de la tarde. O sea que tengo horario de oficina, jajaja.
-¿Cuáles son su principales clientes?
-Tengo toda clase de clientes, abogados, militares docentes. A todos ellos los trato con mucho respeto y siempre les deseo que se ganen el premio mayor.
-¿Cuántos premios ha vendido?
-He vendido 7 premios mayores y unos veinte premios secos.
-¿Y la mayor propina recibida?
-Ah, fue de 500 mil pesos de hace 30 años, plata que era una fortuna. Con ese dinero construí mi casa, le eché la plancha y le hice el segundo piso. Eran unos tiempos en los que el bulto de cemento valía 200 pesos y la volquetada de arena, 4 mil pesos. Yo había salido favorecido con una casa del Instituto Territorial que en esa época valía 28 mil pesos y se pagaba a largo plazo.
-¿Lo que quiere decir que la de Lotero es una buena profesión?
-Si uno es metódico es la mejor profesión. Mi hermano Edgar Edmundo Delgado, quien fue concejal de Pasto, me decía que dejara de vender lotería, pero afortunadamente no le hice caso. En unas breves épocas de la vida probé con un taxi y una ferretería, pero me fue mal, en cambio con la Lotería me va superbién.
-¿Ser metódico que es para usted?
-Ser responsable, no tener ningún vicio, no tirase la plata en licor o nenas. Yo gran parte de lo que he ganado lo invertí en la educación de mis 6 hijos y de ello, me siento muy orgulloso. También creo que le debo mi éxito a haber tenido excelentes jefes, como la señora Cecilia Quiñonez.
-¿Lo que quiere decir que usted no se toma sus traguitos?
-Claro que sí. Cuando voy a una fiesta, me los tomó, bien sabroso, sacó a bailar a la muchacha más bonita y le arrimó el (censurado), porque la vida hay que disfrutarla.

