Danny J. Marcillo

Lobos disfrazados de ovejas

POR: DANNY J. MARCILLO

Cuántas veces les ha pasado que se encuentran con una persona que siempre quiere sobresalir, esa persona que se disfraza de oveja, pero en verdad es un lobo. En la vida hay que aprender a cuidarse de este tipo de individuos que solo buscan hacer el mal y quedar bien ante los demás dejándote por el suelo, a estos sujetos les llamó: lambones, o regularmente se los conoce como “sapos”.

Según los psicólogos muchas veces no tienen habilidades para mostrar un buen trabajo, entonces confunden la amabilidad con la lambonería y para ellos es una herramienta de vida que los ayuda a defenderse o crecer en el ámbito laboral y así se hacen ver como unos “reyes”. Los expertos en psicología del trabajo dicen que las actitudes de ellos pueden afectar el clima laboral, pues es normal que, además de ‘lambones’, sean hipócritas, chismosos y lo que quieren es dañar a los demás para su propio beneficio.

Según dice, muchas personas acuden a la lambonería para tratar de subir alguna posición en la empresa. Sin embargo, es mejor que se den cuenta de que el jefe siempre va tener claro quién cumple o no con los resultados y eso es lo que importa finalmente.

El lambonismo no es un oficio, pero todos podemos identificar en nuestro entorno profesional a alguien con estas características. existen dos tipos de personajes que hacen de la adulación su estilo de vida, por un lado, los lambones conscientemente incompetentes, es decir, que lo hacen a propósito para salvar su pellejo y los inconscientemente incompetentes que no saben que lo son, pero en ambos casos generan rechazo o antipatía por parte de sus compañeros.

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Es por eso que esta sala está dedicada a todas las personas que quieren dañar a los demás por medio de chismes e hipocresía, Sonrientes y carismáticos en las primeras citas, pero posesivos y agresivos cuando hay mayor intimidad, ese es el común denominador de los lobos con piel de oveja que deambulan por el mundo.

Es casi imposible detectar estos comportamientos, ya que utilizan disfraces que los hacen pasar desapercibidos o parecer inofensivos. “Su apariencia inicial es muy atractiva jovial y amable, por eso es difícil desenmascararlos.