No se le puede negar al señor presidente de la República, Gustavo Petro sus buenas intenciones en el sentido de lograr la paz total en el país, un viejo y anhelado sueño de millones de colombianos.
Pero lamentablemente esos esfuerzos de paz, se han visto truncados a consecuencia de un verdadero caos organizativo, donde como el mismo mandatario nacional lo ha reconocido ha habido apresuramientos y cosas hechas a la carrera, por lo que esta es la hora, más de un año después, que no nos queda otra alternativa que decir con mucho pesar, ¡lástima por la paz total!
En ese sentido, nos parece que los mayores dolores de cabeza, los causa la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional Eln, una organización armada, de la cual estamos seguros, todos los gobiernos pueden dar fe de lo difícil que es negociar con ellos, así como su peligrosa particularidad de perpetrar terribles acciones terroristas, precisamente en momentos en que sus dirigentes se encuentran sentados en las mesas de negociaciones.
Así lo puede decir el expresidente Iván Duque, a quien le tocó vivir el espantoso atentado en Bogotá, en contra de la Escuela de Policía, en el que perdieron la vida 23 personas, lo que hizo que el entonces mandatario detuviera de inmediato el proceso de paz con esa guerrilla.
Ahora, fieles a su manera de comportarse, los señores del Eln, procedieron a generar un gran escándalo mediatico, con el secuestro del señor Luis Manuel Díaz, padre del famoso jugador de fútbol, Luis Díaz, también cuando sus dirigentes se encuentran en conversaciones con el Gobierno Nacional.
Sinceramente, tenemos que decir que como van las cosas abrigamos pocas esperanzas de llegar a corto plazo a resultados positivos con el Eln, puesto que raíz del secuestro del padre del futbolista, han manifestado que en la mesa de diálogos no se ha tocado nada referente a cesar los secuestros.
Además, a raíz del caso del señor Diaz y del clamor nacional para que se libere a todas las personas que en estos momentos son víctimas del secuestro, los dirigentes del grupo armado, de inmediato respondieron que “no hay que hacerse muchas ilusiones”.
Otra piedra en el zapato para la paz total, la constituye, los intentos con las disidencias de las Farc, los cuales han resultado desorganizados y con muy poca claridad, tanto así que en los últimos días, sus dirigentes manifestaron que se levantaban de la mesa de negociaciones.
De esta manera nos enfrentamos a un proceso de paz total, cuyos resultados hasta el momento son bastantes adversos, lo que se refleja en la difícil situación del país.
En efecto, en estas semanas finales del año, estamos viendo como los casos de secuestros han aumentado de manera dramática en el territorio nacional, así como los episodios de violencia, sin que ahora se vean puertas abiertas a favor de la paz.
De tal modo, consideramos que en este loable emprendimiento del señor presidente de la República, Gustavo Petro, tiene que haber de manera obligada importantes replanteamientos, especialmente en lo que tiene que ver con la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional Eln.
Sabemos que ya el Alto Comisionado para la Paz, Danilo Rueda, les dio a conocer los protocolos del Gobierno Nacional para continuar con el proceso, pero estamos seguros que será muy poco el acatamiento de esta guerrilla a esas directrices, por lo que la esperanza de Paz Total sigue siendo mínima.