Por. Luis Eduardo Solarte Pastás
El alcalde de Pasto, Germán Chamorro de la Rosa, rindió cuentas de su trabajo desde el Corregimiento de Obonuco bajo un novedoso esquema de participación comunitaria que se ha denominado “Feria de Gestión”.
La audiencia pública de rendición de cuentas de la vigencia 2022, encabezada por el alcalde y con intervención de los diferentes secretarios del gabinete, fue un espacio propicio para socializar y retroalimentar su gestión pública con la comunidad y, de esta forma, continuar construyendo conjuntamente el camino hacia la prosperidad colectiva y el desarrollo territorial.
“Entre los indicadores más importantes presentados durante la jornada se encuentran los proyectos que contribuyen a la conservación y cuidado del ambiente, la protección a los animales y el apoyo a iniciativas sostenibles y amigables con el entorno, como la gestión de un proyecto de energía renovable para instituciones educativas ante el Fondo Fenoge, por un valor de 4.500 millones de pesos.
Desde la dimensión social, liderada por la Gestora Social Marcela Hernández, se lideran acciones para cerrar las brechas sociales entre el sector urbano y rural, velar por los derechos de toda la población, en especial aquella en estado de vulnerabilidad, y hacer del arte, la cultura y el emprendimiento, un eje de desarrollo para el territorio. El beneficio de 5 metros cúbicos de agua potable para 6 mil familias estrato 1 hace parte de estas estrategias.
Por otra parte, la reactivación económica después de la pandemia avanza positivamente gracias a programas y actividades que priorizan la innovación y fomentan la empleabilidad, el emprendimiento y nuevas dinámicas comerciales. Además, la Alcaldía Municipal adelanta el mejoramiento y mantenimiento de la malla vial, tanto en zona urbana como rural”.
Así las cosas y después de escuchar el informe del Chamorro de la Rosa, es fácil concluir que la gestión que adelanta ha sido silenciosa, pero muy efectiva y acertada para el cumplimiento del Plan de Desarrollo, a pesar de las secuelas dejadas por la crisis sanitaria generada por el coronavirus y el alto índice de la inflación que azota al país.
Y es aquí en donde hay que resaltar que la gente pastense se caracteriza por levantarse ante las adversidades. Por ello, el alcalde ha convertido las dificultades en una oportunidad para buscar alternativas de solución a la problemática socioeconómica que se presentó.
Pero todo esto es el resultado de una tarea que no es de un día, ni de una semana ni de un mes. Es una labor a corto, mediano y largo plazo que comienza a germinar en los cuatro puntos cardinales del municipio para que, en un tiempo no muy lejano, los habitantes observen en cada amanecer ondear en lo más alto del Volcán Galeras la bandera que distingue a Pasto como La Gran Capital.
Con su informe de rendición de cuentas, Chamorro de la Rosa demostró una vez más que hay que decir sólo las cosas que se han obtenido cuando éstas ya son un hecho, una realidad, para no caer en el vicio de otros gobernantes y políticos que se caracterizan por su elocuente retórica cargada siempre de falsas promesas a sabiendas de que no podrán ser cumplidas.

