En lo que a nosotros nos parece un hermoso proyecto, en nuestra ciudad de Pasto, mujeres víctimas del conflicto armado construyen paz por medio de las historias y vivencias que relatan en colchas en el marco de un proyecto denominado “Arrópame con tu esperanza.
Nos estamos refiriendo a un modelo de reintegración comunitaria que lleva el acertado nombre de Entre-tejiendo Acciones de Paz y Reconciliación, iniciativa de la asociación Buscando Nuevos Senderos.
Es así como mujeres que en una u otra forma han sido víctimas del conflicto, son quienes protagonizan este singular emprendimiento, cuyo objetivo primordial es la construcción de la paz a través del arte y la memoria, lo que se combina en la elaboración de unas colchas, en las que se plasman las historias de lo que ha sido el conflicto armado y los padecimientos a los que se han visto enfrentados las mujeres a través de largos de guerra y por ende de toda clase de sufrimientos.
Nos parece una tarea transcendental que merece el total apoyo de todos nosotros por todo el profundo significado que tiene esta singular actividad, que promueve la líder y defensora de Derechos Humanos de la asociación Buscando Nuevos Senderos, Carmen Guaquez.
«Hoy, a la vez que destacamos este bello emprendimiento, le hacemos eco al llamado de sus promotores, para que las comunidades apoyen a nuestras mujeres víctimas del conflicto armado, personas luchadoras a las que no se les debe dejar solas en su sagrada misión de contar en bordados la historia del conflicto armado en Colombia».
Ella manifiesta que el objetivo es mostrar todas las iniciativas de memoria histórica que se ha construido con el protagonismo de las mujeres víctimas del conflicto armado, cuyas historias han quedado recopiladas en esas colchas, donde tejido tras tejido, se cuentan muchas historias, en desarrollo de las cuales se han derramado muchas lágrimas.
En esas colchas se han tejido las historias de esas valerosas mujeres, quienes en el marco de la violenta historia del conflicto armado, han sido víctimas de pérdida de sus seres queridos, desplazamiento forzado, abusos sexuales, minas antipersona, en fin, todas las situaciones que se suelen presentar en desarrollo de un conflicto armado.
Por ello, compartimos el punto de vista de la representante legal de la asociación, cuando manifiesta que este proceso es muy bonito, puesto que hace que las mujeres adquieran la fortaleza que necesitan para buscar la verdad, la Justicia, la reparación a la que tienen derecho y principalmente, la no repetición.
Afirma la coordinadora que todo esto proyecto de las mujeres víctimas del conflicto armado, se ha podido sacar adelante con recursos propios y con la ayuda de otras personas y entidades como la Gobernación de Nariño, que se ha convertido en un aliado estratégico de este valioso proyecto, al igual que la Personería.
Encontramos entonces, bordados en las colchas mensajes en los que expresa que los cuerpos de las mujeres no son botines de guerra, lo ha sido uno de los grandes flagelos en la historia del conflicto armado en el país. También los mensajes le dicen sí al perdón y la reconciliación, en un duro pero valioso trabajo, realizado en medio de toda clase de dificultades, en especial, la falta de recursos económicos, lo que les impide por el momento lograr una mayor cobertura de sus mensajes.
Por ello, hoy a la vez que destacamos este bello emprendimiento, le hacemos eco al llamado de sus promotores, para que las comunidades apoyen a nuestras mujeres víctimas del conflicto armado, personas luchadoras a las que no se les debe dejar solas en su sagrada misión de contar en bordados la historia del conflicto armado en Colombia, una manera en las que ellas luchan por el perdón y la reconciliación, con lo que todos y todas buscamos alcanzar muy pronto la paz total.

