La violencia que despliegan los grupos armados ilegales se constituye en estos momentos en la peor amenaza para la elección de las curules en la Cámara de Representantes para las víctimas individuales o colectivas del conflicto armado en el departamento de Nariño.
Así lo acaba de manifestar la Fundación Paz y Reconciliación Pares, que además denunció la falta de garantías electorales no solo en Nariño, sino en la mayoría de las regiones del país, donde se llevarán a cabo estas elecciones especiales.
Las Circunscripciones Transitorias Especiales de Paz (Ctrep), se votarán en 16 municipios nariñenses, 11 de ellos de la costa pacífica donde de acuerdo con el reporte de Pares es el epicentro de los mayores episodios de violencia y en ese sentido, se menciona a Tumaco, como uno de los más afectados por esta situación.
En su cuarto informe denominado Violencia y Dinámica Electoral, Pares afirma que, desde el año anterior y principios del 2022, es evidente la falta de garantías electorales y de orden público en los territorios, lo que se constituye en una grave amenaza para el normal desarrollo de estas elecciones que se harán por primera vez en el país.
Al respecto, el coordinador de la Línea de Democracia y Gobernabilidad de Pares, Esteban Salazar, advirtió que podría presentarse un alto grado de abstención electoral debido a la presencia de grupos armados ilegales en el Pacífico Nariñense, Pacifico Medio, Bajo Cauca y Catatumbo, especialmente en los municipios de Tibú, San Andrés de Tumaco, El Tambo y El Tarra.
Riesgos
Salazar expresó que se han identificado tres riesgos estructurales en la elección de las curules de paz, sobre los cuales hacen un llamado de atención.
“El primero, es la presencia de estructuras armadas en estos territorios. Recordemos que son 167 municipios y de ellos en 138 hay por lo menos la presencia de un actor armado”.
Según Pares, las disidencias de las Farc hacen presencia en 90 municipios, seguido por El Clan del Golfo en 73 y el Eln en 70 municipios (Ctrep).
Salazar señaló que el segundo riesgo estructural son las economías ilegales, principalmente por la siembra de cultivos de hoja de coca, que están presentes en 116 de los territorios circunscritos de paz.
En tercer lugar Pares resaltó que un mecanismo de violencia política, que amenaza la elección de las curules de paz es la cooptación política por parte de clanes políticos.
“En las 16 circunscripciones hemos identificado 33 clanes que tienen un interés puntual de cooptar estas curules de paz, en donde tienen participación clanes asociados a departamentos en el Cesar, en el sur de Córdoba, en Norte de Santander y en Chocó”, expresó Salazar.
Llamado
El coordinador de Democracia y Gobernabilidad le hizo un llamado a la Comisión Nacional de Garantías Electorales “para que rodee las candidaturas de las circuncisiones de paz en una condición de seguridad integral y se garantice la seguridad de los candidatos”.
Por último, Pares le solicitó a la Registraduría que garantice las condiciones para que las víctimas del conflicto armado puedan ejercer su derecho al voto.
Se recuerda que estas 16 curules para la Cámara de Representantes fueron establecidas en el Acuerdo de Paz y hacen parte de un mecanismo de reparación y apertura democrática para las regiones y para las víctimas afectadas por el conflicto armado en Colombia.