Por: Jorge Enrique Tello Chávez
Con base al libro de Génesis, Capítulo 2, nos asegura que Dios formó de barro a Adán y dijo, “No es bueno que el hombre esté solo”. Entonces hizo caer en un profundo sueño a Adán, le extrajo una costilla y formó a Eva, su mujer y la llevó al hombre y éste exclamó: “Esta si es hueso de mis huesos y carne de mi carne”. Estableciéndose así el matrimonio y recibiendo su orden de Creced y multiplicaos.
Constituyéndose la Madre en la base fundamental de la familia y de la sociedad actual. Sus padres en el seno de su hogar, le enseñaron los principios y valores éticos, morales y cristianos, que la llevarán en su edad madura a ser Madre, que alojará en su vientre la semilla aportada por su esposo, para concebir a un nuevo ser humano, que lo cuidará con mucho denuedo, esmero, entrega, dedicación, responsabilidad y cariño, enmarcados en ese Amor, que sola Mamá puede darnos.
Dios le encomendó a ella la noble misión de darnos la Vida y se constituirá en nuestro modelo a seguir en todas las etapas de nuestro crecimiento y desarrollo. Será nuestra primera Maestra, que nos irá enseñando a medida que pasen los días, los meses y los años, los aspectos fundamentales para alcanzar nuestro crecimiento y desarrollo humano, en todas las etapas de nuestra vida.
No ahorrará esfuerzo alguno para proveernos nuestros alimentos, que garanticen nuestra nutrición, salud y bienestar. Realizará toda esa gama de juegos desde nuestra cuna, nuestros primeros pininos, nos mostrará sus manos para que no resbalemos y caigamos, porque nos sujetarán para llevarnos siempre por el camino seguro.
Será la que conozca nuestros sentimientos y emociones cuando estemos dichosos, felices y contentos; pero también, estará presente en los tiempos de desilusiones, errores y fracasos, colocando límites, cuando incumplimos con nuestras obligaciones en las Instituciones Educativas.
Mamá siempre será nuestra Amiga y Confidente: Porque en ella, depositamos nuestras inquietudes, dudas y situaciones difíciles; ella nos corregirá a tiempo, aplicando los principios de la Sabiduría Divina y humana, capaz de resolver nuestros problemas, por más difíciles que sean.
Por las ocupaciones profesionales de papá, será ella nuestra Acudiente. Quien asistirá a la entrega de Informes Académicos, preguntará sobre nuestro rendimiento académico y comportamiento en clase a nuestros profesores y maestras.
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Por todo lo anterior, hoy en EL DÍA DE LAS MADRES, su esposo y sus hijos en cada una de las familias nariñenses, se reunirán para rendirle el Gran Homenaje al Ser más querido y entrañable, que lo ha dejado todo para brindarnos lo mejor de su corazón, enmarcando ese Gran Amor Maternal.
Enaltecer su labor incansable dentro del hogar, en donde nos ha demostrado que es la primera en levantarse y la última en ir a conciliar el sueño en la noche. Dejando todo preparado y listo para que la luz del nuevo día, nos abra las puertas y ventanas, con la entrada del Divino Creador a todos los rincones de nuestros corazones.
¡FELIZ DÍA MAMÁ!