Pasto vivió con todo su esplendor la edición 2025 del Carnaval de Negros y Blancos, uno de los eventos culturales más esperados y representativos de Colombia. En esta ocasión, el tradicional desfile de la Familia Castañeda se consolidó como uno de los momentos más esperados, brindando una explosión de talento, arte y color que sorprendió tanto a los pastusos como a los turistas que llegaron a la ciudad para ser parte de esta celebración.
El 4 de enero, un día marcado por un clima frío y lluvioso, la Familia Castañeda hizo su entrada triunfal a la ciudad, desafiando las inclemencias del tiempo. A pesar de la lluvia, la multitud no dejó de corear y celebrar al paso de la emblemática familia, cuya participación se convirtió en un homenaje vivo a las tradiciones nariñenses y al esfuerzo de los artistas locales que, con su dedicación, dan vida a cada rincón de la festividad.
Expresiones
El desfile comenzó con la participación del pregonero Pericles Carnaval, quien junto a la Reina del carnaval dio inicio formal a las festividades, marcando el tono alegre y vibrante que caracterizó a todo el evento. La Familia Castañeda, acompañada de un grupo de danzantes, fue la estrella del recorrido, interactuando con el público y mostrando, a través de sus movimientos y expresiones, el gran nivel artístico que distingue al Carnaval de Negros y Blancos de Pasto.
En medio del bullicio de la fiesta, la carioca, el talco y la pintica fueron los elementos fundamentales que adornaron las calles, donde los asistentes no dudaron en lanzarse a la diversión, cubriéndose con polvos de colores y danzando al ritmo de la música tradicional que invadió la ciudad. Los colores brillantes y la alegría desbordante crearon una atmósfera única que no solo reflejó el espíritu festivo, sino también la profunda identidad cultural de la región.
Este carnaval, que año tras año gana en relevancia, se erige como un claro reflejo del potencial artístico y cultural de Pasto, resaltando el trabajo de los maestros nariñenses, quienes con su creatividad y esfuerzo logran que esta fiesta sea una de las más importantes no solo en Colombia, sino en el mundo. Así, el Carnaval de Negros y Blancos 2025 no solo dejó una huella imborrable en la memoria colectiva, sino que también demostró, una vez más, que la cultura de Pasto es un tesoro que debe celebrarse y preservarse.