La organización del Mundial Femenino Sub-20 en Colombia, previsto del 31 de agosto al 22 de septiembre, ha planteado retos logísticos significativos para la Dimayor y los equipos de la Liga BetPlay 2024-II. Este evento de talla mundial, que reunirá a 24 selecciones en Bogotá, Cali y Medellín, ha dejado a los equipos locales sin algunos de sus estadios más emblemáticos, ya que la FIFA requiere que estos escenarios sean entregados con al menos 20 días de anticipación para su preparación.
Los estadios Nemesio Camacho El Campín, Atanasio Girardot, Pascual Guerrero y Polideportivo Sur, que albergarán tanto los partidos como los entrenamientos del torneo, han sido reservados para el Mundial, lo que ha complicado la programación del torneo local. Como resultado, la Dimayor se ha visto obligada a aplazar múltiples partidos, especialmente durante las jornadas sexta y séptima, afectando la continuidad del campeonato.
Entre los encuentros más destacados que han sido reprogramados se encuentran el clásico entre América de Cali y Millonarios, correspondiente a la quinta fecha, y el duelo entre Envigado y Deportivo Pasto, inicialmente programado para el Polideportivo Sur. La falta de disponibilidad de estos estadios ha generado un desafío adicional para los organizadores y equipos, quienes deben adaptarse a la situación mientras apoyan la celebración de un evento tan importante para el fútbol femenino y el deporte en general en Colombia.
El Mundial Femenino Sub-20 es una oportunidad única para mostrar el talento y la pasión por el fútbol en el país, pero también ha puesto a prueba la capacidad de organización y logística del fútbol profesional colombiano, que trabaja arduamente para encontrar soluciones a los desafíos presentados.