Pyongyang, Corea del Norte – En un movimiento que ha generado preocupación internacional, Corea del Norte ha lanzado uno de sus misiles más poderosos al mar de Japón. Este lanzamiento, que tuvo lugar el 1 de noviembre de 2024, ha sido descrito como una demostración de fuerza y un desafío directo a la seguridad global.
El misil, identificado como Hwasong-19, es el más avanzado en el arsenal norcoreano y ha alcanzado una altura de 7,887.5 kilómetros, volando durante 85 minutos y 56 segundos1. Este proyectil balístico intercontinental es capaz de transportar ojivas nucleares y alcanzar objetivos lejanos, lo que lo convierte en una amenaza significativa para la estabilidad regional y global.
El líder norcoreano, Kim Jong-un, supervisó personalmente el lanzamiento y lo describió como una «acción militar apropiada» para demostrar la capacidad de Corea del Norte de responder a las amenazas externas1. La agencia estatal de noticias KCNA ha calificado el Hwasong-19 como «el misil estratégico más poderoso del planeta»1.
Este lanzamiento se produce en un contexto de crecientes tensiones internacionales, con Corea del Norte buscando reafirmar su posición en el escenario global. Analistas surcoreanos sugieren que Pyongyang pretende desviar la atención de su implicación en la guerra de Ucrania y demostrar a Washington que su programa nuclear es irreversible1.
La comunidad internacional ha condenado enérgicamente este lanzamiento. Estados Unidos, Corea del Sur y Japón han expresado su preocupación por la escalada de tensiones y han instado a Corea del Norte a detener sus pruebas de misiles y a retomar las negociaciones para la desnuclearización de la península coreana2.

