La Asociación de Pymes, Micro Empresas y Emprendimientos para el Comercio Electrónico (APPCE) expresó su preocupación frente al impacto que podría generar un aumento del salario mínimo por encima de dos dígitos, en un contexto donde el IPC esperado se proyecta en un solo dígito, así como por los escenarios de nuevos impuestos que podrían derivarse de un eventual decreto de emergencia, el cual aún no ha sido definido.
Desde el gremio se advirtió que este tipo de discusiones suele concentrarse en la capacidad de absorción de las grandes empresas, sin incorporar de manera suficiente la realidad del pequeño empresario y de los gremios que representan a las mipymes, a pesar de que estas constituyen más del 90 % del tejido empresarial colombiano, generan cerca del 80 % del empleo formal y aportan alrededor del 40 % del PIB.
La APPCE recordó que las mipymes estructuran su base salarial en función del salario mínimo, por lo que incrementos elevados impactan toda la nómina, las prestaciones, los aportes a seguridad social y los costos laborales, con efectos directos sobre la contratación, la estabilidad del empleo y la sostenibilidad empresarial. En un entorno de menor consumo y altos costos financieros, este escenario incrementa el riesgo de menor contratación formal, mayor uso de contratos a término fijo, tercerización forzada y crecimiento de la informalidad laboral.
En relación con los posibles cambios tributarios, la APPCE señaló que, aunque no se han definido medidas concretas, propuestas como un eventual aumento del gravamen a los movimientos financieros del 4×1000 al 5×1000 representaría un impacto significativo sobre la liquidez de las mipymes, encareciendo la operación diaria de las empresas formalizadas.
Asimismo, el impuesto al patrimonio para personas jurídicas podría afectar de manera desproporcionada a microempresarios con activos productivos pero con flujos de caja limitados, desconociendo su capacidad real de pago.
“El riesgo para las mipymes no está en una medida aislada, sino en el impacto acumulado de aumentos salariales elevados, menor consumo y mayores cargas tributarias, lo que puede traducirse en menos empleo formal y más informalidad”, afirmó Edgar Felipe Arcila, presidente de la APPCE.
Finalmente, el gremio hizo un llamado al Gobierno Nacional a abrir un diálogo técnico, amplio e incluyente con los representantes de las mipymes, con el fin de evaluar el impacto económico real y diferenciado de estas decisiones y construir soluciones que protejan la empleabilidad, la productividad y la sostenibilidad del tejido empresarial colombiano.

